Lisette González, coordinadora de investigaciones de Provera, condenó la opresión que enfrentan los trabajadores de Sidor y lamentó la postergación de un foro de diálogo social mediado por la OIT programado para el mes pasado.
La ONG Prova informó que al menos 87 sindicalistas han sido detenidos por defender sus derechos laborales durante los últimos 10 años bajo el mandato del autoproclamado “presidente de los trabajadores” Nicolás Maduro.
La coordinadora de investigaciones de Provea, Lissette González, presentó esta imagen durante su discurso en el 188 período de sesiones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
“Entre 2013 y 2022, los primeros 10 años del gobierno de Nicolás Maduro, 87 dirigentes sindicales han sido detenidos y procesados por defender sus derechos”, afirmó.
Los defensores de derechos humanos afirman que los líderes sindicales forman un “sector de alto riesgo” debido a las represalias que enfrentan por exigir sus derechos, ya que la mayoría de las protestas del país ahora se centran en los trabajadores.
Según datos de Provea, el 71% de las protestas registradas entre enero y junio de 2023 estuvieron centradas en el ámbito laboral, situación condicionada por los bajos salarios en medio de una política salarial que no se ha traducido en ningún ajuste en 20 meses.
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Los ataques contra dirigentes sindicales han aumentado en los últimos años. Sólo en 2022 se registraron 344 casos de amenazas contra trabajadores y dirigentes sindicales.
Como señaló González en su discurso, las acciones contra la clase trabajadora “incluyen acoso, persecución, amenazas de despido e incluso prisión”.
También mencionó la detención arbitraria de Gabriel Blanco, Alcides Bracho, Emilio Negrín Reynaldo Cortés y Alonso Meléndez, seis dirigentes sindicales que fueron condenados en agosto pasado a 16 años de prisión en un juicio basado en la ausencia de pruebas y el uso de capturas de pantalla. Un chat como único apoyo.
“Este patrón de persecución a líderes sindicales ha continuado a lo largo de 2023, las protestas sindicales en Bolívar por los bajos salarios, las repetidas violaciones de los convenios colectivos han creado una fuerte respuesta oficial que busca controlar estas protestas”, dijo.
Esto se evidencia en la continua persecución a los trabajadores de Sidor, quienes protestan constantemente por la violación de sus derechos laborales. Este año al menos 10 empleados de la empresa han sido detenidos.
“Condenamos el papel del Poder Judicial en la violación de la libertad sindical en el caso de las protestas de Sidor. El 13 de junio, el Juzgado de Primera Instancia del Trabajo emitió un fallo que prohibió la interrupción de operaciones. Este sistema es una clara violación al derecho de protesta así como a la libertad de expresión y comunicación de los dirigentes sindicales”, argumentó.
Finalmente, citó la suspensión del foro de diálogo social mediado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) previsto para los días 5 y 6 de octubre, como ejemplo del incumplimiento por parte de Venezuela del Convenio 87, en materia de libertad sindical.
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