Luego de las exitosas presentaciones de Sor Angélica y Gianni Schicchi, la segunda temporada de ópera está a punto de comenzar en el Teatro Teresa Carreño y lo hará este fin de semana con los clásicos italianos Cavalleria Rusticana y Pagliacci.
Las piezas que conforman el díptico más representativo del verismo italiano se ofrecerán en cuatro funciones: hoy y mañana, 1 de julio, a las 19:30 horas, así como el domingo 2 de julio, a las 11:00 y a las 16:00 horas.
Irving Peña, director ejecutivo del Teatro Teresa Carreño, destacó que la promoción y expansión de este género comenzó con la creación de la compañía de ópera: “lo que nos permitió reunir a los mejores cantantes del país, jóvenes de la historia que ahora son parte de un elenco estable del Teatro Teresa Carreño con grandes resultados y grandes emociones.
Agregó que la iniciativa busca continuar con la tradición operística venezolana de finales del siglo XIX, así como reactivar artística y técnicamente el campo laboral del talento nacional.
“Alrededor del siglo XX se creó la buena ópera porque la ópera tiene un valor universal. Es un género que se encuentra en todo el mundo y prácticamente refleja un momento determinado de nuestras vidas y activa una de las pocas expresiones que involucran a más de 200 gente en el escenario”.
En este sentido, destaca el poder reflexivo de estos montajes.
“Estos actos hablan de violencia, desesperación, odio; Lo que el odio puede expresar y sus consecuencias. Podemos tener una interpretación muy interesante y actual del mensaje de esta ópera”, dijo.
Cavalleria rusticana es un melodrama de Pietro Mascagni que cuenta dos historias de amor, celos y traición: Turiddur, que sigue viendo en secreto a su ex amante Lola, a pesar de que está casada con Alfio; y Santuzzar, que se deja seducir por Turiddu y se desespera porque ella lo rechaza y mira a Lola.
Por su parte, Pagliacci, originalmente una obra de 1892 de Ruggero Leoncavallo, describe la tragedia de un payaso en una compañía de teatro y la infidelidad de su esposa.
Miguel Salvatierra, el actor e intérprete de Luca de Pagliacci, describió que se basó en momentos difíciles de su vida personal para caracterizar algunas de estas duras escenas “y creo que es algo muy bonito y está dejando algo muy bonito para el público”.
Por su parte, Hendrik Cisneros, quien interpreta a Silvio, el amante de Neda, en la obra de Leoncavalo, destaca la importancia de poner en escena piezas clásicas de esta magnitud con talento venezolano.
“Ver la ópera en vivo es ver la magia de la orquesta, el coro. Es completamente diferente de lo que hemos visto antes y es un género que vale la pena aprender”.
Las entradas están a la venta en la taquilla del teatro y en la plataforma MakeTicket.