La cancillería del gobierno de Nicolás Maduro ha emitido un comunicado en el que rechaza la sentencia emitida por Estados Unidos contra la inhabilitación de la candidata opositora María Corina Machado.
“La fuerte democracia participativa y heroica de Venezuela no requiere ni acepta la supervisión de otras naciones, mucho menos los sistemas democráticos indirectos y las estrictas restricciones a la participación, impuestas por intereses económicos y un profundo racismo institucionalizado, que registran privaciones practicadas cada año. La numerosa población afro -descendientes de derechos democráticos de la parte”, citando el texto emitido por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela acusó a la administración de Biden de entrometerse en los asuntos internos del país e insistió en que Estados Unidos no tenía moral para comentar sobre la decisión, que era “una medida legítima de las instituciones democráticas de otros países”.
Repudio general a la decisión del regulador
El anuncio de la Contraloría General de la República de inhabilitar a María Corina Machado por 15 años para ejercer cargos públicos ha sido ampliamente rechazado por el pueblo venezolano y la opinión pública internacional.
La Organización de los Estados Americanos (OEA) emitió un comunicado en el que condenó la inhabilitación de María Karina Machado para cualquier cargo público, calificando el acto como una violación al Estado de derecho.
La OEA confirmó que la decisión fue arbitraria y contraria a los derechos civiles y políticos fundamentales, incluido el derecho a votar y ser elegido, consagrado en el artículo 23 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos.
Según el organismo internacional, el gobierno de Nicolás Maduro recurrió al juicio político y las sanciones para “aferrarse al poder” y “diluir cualquier semblante de democracia”.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, también criticó la decisión de la Contraloría y dijo que ninguna institución administrativa debe limitar los derechos políticos de los ciudadanos de un país.