Recientemente se dio a conocer que María Corina Machado, la candidata de la oposición en las primarias, ha sido inhabilitada para ejercer cargos públicos en el país por parte de la Contraloría General de la República (CGR).
Machado ha sido inhabilitado para ejercer cargos de elección popular por 15 años, debido a una investigación de paternidad en la CGR que constató errores y omisiones en las declaraciones juradas de paternidad evaluadas durante las respectivas auditorías.
Daniel Vernaghi, doctor en ciencias políticas y profesor de la Universidad Simón Bolívar (USB), señala que existen vacíos legales con la inhabilitación, ya que nadie puede ser inhabilitado salvo por delitos o circunstancias extremas. Orden, a diferencia de un tema en la Contraloría.
“Parece que (inhabilitar) es solo una táctica más para seguir inhabilitando a personas que se sienten incómodas con el gobierno”, explicó en una entrevista. efecto leña.
Si bien se esperaba la inhabilitación de Machado a Bernaghi, es algo que probablemente esté generando el efecto contrario al que pensaba el propio gobierno, pues la oposición, que estaba completamente dividida, se está uniendo en torno a una figura como María Corina Machado.
“La incompetencia nunca genera ingresos políticos para el gobierno”, dice.
El politólogo Jiménez coincide con Vernaghi al afirmar que aunque es pronto para saber si esta estrategia de neutralización de posibles opositores puede funcionar para el gobierno, por ahora no parece haber dividido a la dirigencia opositora, sino todo lo contrario.
“Hemos visto una respuesta de solidaridad y simpatía de todos los candidatos en la contienda primaria (…) El tiempo dirá si la estrategia del gobierno de reprimir y sacar a María Karina logra o logrará dividir a la oposición. Por ahora, en el corto plazo, lo que vimos fue una respuesta comprensiva; Ahí, en realidad, el gobierno no parece haber logrado sus objetivos hasta ahora”, explicó.
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Jiménez asevera que son estrategias para deprimir y dividir el voto opositor, porque en un contexto autoritario el gobierno tiene un umbral electoral que ronda el 25% o 27% del electorado, entonces necesita fragmentar el voto opositor. Oposición a través de medidas de represión política, como la inhabilitación de un candidato.
“Todo el entusiasmo que ha generado María Corina a través de este tipo de reuniones cívicas es deprimente y se detiene precisamente porque ha sabido organizarse como los demás candidatos”, señaló.
El experto indica que el gobierno quiere promover la abstinencia sacando del juego a este candidato. “Un exclusionismo que es deliberado, buscado por el Gobierno para mantener en casa a la población opositora y aumentar sus posibilidades de victoria, fuera del control de las instituciones, que son absolutas”, apunta.
Mensaje desde Miraflores
Para Vernaghi, esta medida parece buscar un efecto similar a lo ocurrido en Nicaragua, donde Daniel Ortega imposibilitó la participación de la oposición en las elecciones, lo mismo que ocurre en China, Corea del Norte y países con sistemas de izquierda radical.
Los expertos dijeron, desde el poder quieren hacer elecciones sin elecciones reales. “La mera asistencia son pocas opciones. De hecho, lo que el gobierno quiere es que la gente vaya a las urnas que el propio gobierno siente que puede controlar en forma, fondo y resultado”, explicó.
El politólogo Jiménez afirma que un régimen autoritario opera según la lógica de conservar el poder a toda costa. “Si nos remontamos al pasado, es decir, a los últimos 10 años, incluso antes de eso, vemos que hubo una lógica consistente de conservar el poder a toda costa y pasó por varios procesos y decisiones violentas y no violentas. Violento represión”, dijo.
Jiménez cree que es más importante ver si la sociedad civil bien organizada, así como los que participan en primarias, se coordinan con comisiones primarias y plataformas unitarias, logran aumentar los costos de futuras incompetencias o futuras supresiones de liderazgos. y la sociedad
El experto señaló que la oposición podría superar estos obstáculos si se organizara internamente denunciando violaciones al derecho a la participación política en organismos internacionales.
“No sabemos si ellos (el gobierno) están dispuestos a cerrar completamente todas las vías e imponerse solo por la fuerza bruta, es decir, solo por la violencia de Estado. Ojalá no sea así, pero está por ver y para que no sea así, creo que todavía hay espacio, trabajo para intentar avanzar tanto en la sociedad como en el liderazgo en el ámbito democrático. . Exigencias y demandas de la sociedad venezolana».
¿Qué es el significado primario?
Para Varnagy, la descalificación de Machado podría cambiar la organización de las primarias. “No se sabe muy bien si estas primarias van a suceder como esperamos”, explica el experto.
Varnagy también señaló que los candidatos de la oposición, en general, no quieren participar en las primarias si anticipan que pueden estar políticamente descontentos en cualquier momento. Además, explica que las primarias son eventos públicos en los que un segmento de la sociedad civil quiere participar en la elección de un candidato, pero no el Estado.
“Las elecciones primarias son para un sector privado de la población, de tal forma que las inhabilitaciones producidas por entidades ajenas a este grupo de la sociedad no lo afectan. Es decir, María Corina, inhabilitada o no, puede ir a las primarias. , porque está controlado por el CNE No elección, y menos aún, porque esa incompetencia, para lo que cuenta, es la elección presidencial”, aclaró.
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El profesor universitario dijo que, ya sea por consenso o prima facie, el candidato no puede ser inhabilitado para participar en las elecciones, ya que Venezuela enfrenta actualmente un sistema hegemónico y antidemocrático. “El Consejo Nacional Electoral asumirá lo que venga y aceptará la inhabilitación.
Entonces, no permitirá la inscripción de candidatos que sean inconvenientes para el gobierno. Es posible que la estrategia del gobierno sea convocar a elecciones, adelantarlas, decir que “tal o cual candidato no puede participar por inhabilitación”, pretender que los demás creen y realizar una elección legítima para que el gobierno parta de esa premisa. No será impugnada, como ocurrió en las elecciones del 20 de mayo de 2018”, agregó.
Planos A, B, C y D
La politóloga Marihen Jiménez, doctora en ciencias políticas de la Universidad de Oxford, explica que en un contexto autoritario los políticos deben planificar una serie de estrategias para abrir el espacio democrático.
“Es un proceso ideal para mantener el ‘aire vivo’ de la voluntad de cambio político democrático en Venezuela. Las primarias también fueron escogidas como un proceso para restablecer la base de los partidos, de los movimientos, para animar a la ciudadanía y hacerla participar en este proceso”, dijo.
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Para el politólogo, las primarias no estarán asociadas a una persona, sino a un proceso compatible con una sociedad democrática en la búsqueda del cambio político en Venezuela. “Efectivamente, la comisión y la plataforma única tienen que decidir cuánto se puede continuar inicialmente o no, es decir, si el gobierno reprime y aumenta el nivel de represión, me imagino que se puede replantear el campo democrático”, señaló. ..
Jiménez agregó que las primarias deben prepararse para el ejercicio de votación en 2024.
“No debemos despriorizar el ejercicio de los derechos civiles y políticos en la sociedad venezolana. Claramente, el gobierno limitó y condicionó esos derechos civiles y políticos. Pero la ambición no puede condicionarlos. La ambición de las sociedades democráticas es, y debe ser, limitar sus derechos”.
Desafía a la oposición
Varnagi reiteró que probablemente habría un período previo a las elecciones presidenciales, donde el partido gobernante podría desarrollar una estrategia en la que prácticamente competiría solo.
“La descalificación de candidatos es algo así como un estilo en el movimiento más reciente de Nicaragua”, explicó, y también detalló que las acciones que podría tomar el gobierno podrían crear una “avalancha de protestas civiles”.
“Esto puede reactivar las protestas pero puede haber incluso protestas de los socios políticos y comerciales del gobierno; Porque ese arreglo es muy incómodo para los socios, o sea, los socios no quieren verse retratados en tal situación, probablemente Rusia, Irán y China estarán ahí”, vaticinó.
Derecho
Jiménez señaló que en una coyuntura como la elección presidencial en adelante, la oposición tendrá múltiples desafíos, ya que volverá a competir en un contexto autoritario.
Los politólogos revelan que es extremadamente difícil para los candidatos, así como para la sociedad, involucrarse en algún tipo de acción colectiva, debido a la posibilidad de represión.
“Ya entonces vimos gente saliendo a la calle. Ahora no solo visitan los candidatos, tenemos ejemplos de maestros, jubilados, trabajadores de la salud”, dijo.
Jiménez señaló que el primer desafío que enfrenta la sociedad y la oposición es vivir para ver el cambio y construir ese cambio.
Explica que se deben evaluar los tiempos y lugares potenciales de movilizaciones, colectivos y asambleas para proteger el liderazgo y la sociedad, además de tener en cuenta el contexto autoritario.
“No es solo salir a la carretera y ya. Es averso al riesgo, conocedor, tratando de comprender las restricciones impuestas por el autoritarismo, dejando de lado la ambición de participar. Es tratar de canalizar y expresar el verdadero descontento que hay en Venezuela”, dijo.
El experto resaltó que se debe evitar ser reactivo, sino proactivo en la lucha por la democracia en el país. “Sobre los lineamientos y programa mínimo todos los candidatos deben ir a la lucha, es decir, no a la lucha de los individuos, sino a la lucha del colectivo democrático que quiere un cambio democrático para el país”, explicó.
Agregó que la lucha por la democracia no debe ser sólo antiidentidad, las respuestas a dos preguntas básicas deben ser claras: ¿Cuáles son las ideas que se pretenden representar? ¿Y cuál es el programa colectivo?
“Después, cuando Venezuela pueda transformarse en una democracia y ya tenga algún tipo de estabilidad, será natural que cada partido, cada persona y cada organización exprese sus preferencias. Esto es ideal, esto es democracia liberal. Ahora, en tanto, hay que concentrar esfuerzos para unificar el mensaje y presentar un programa común”, explicó.