Varias organizaciones sociales de campesinos y trabajadores de Perú han acordado una protesta continua de diez días exigiendo la renuncia de la presidenta Dina Bolluarte.
Como se denomina este fin de semana el “Día Nacional del Movimiento Popular Permanente” la movilización acordada en el primer encuentro nacional de la región y pueblo organizado, al respecto, Jorge Pizarro, su vocero, explicó que la manifestación se realizará a partir del 19. Finaliza el 28 de julio, Día de la Independencia del Perú.
La reunión analizó informes internacionales que registraron denuncias de violaciones de derechos humanos, incluido un saldo de unas 70 muertes, en su mayoría civiles muertos por armas de fuego durante la primera ola de protestas.
Además de la renuncia de Bouluarte, otros objetivos son la realización inmediata de elecciones presidenciales y parlamentarias anticipadas y un proceso hacia la Asamblea Constituyente, dijo a Prensa Latina.
En esa línea, la Central Única Nacional de Rondas Campesinas del Perú (Kunarc) informó que delegaciones del norte, sur y centro del país se encuentran listas para marchar contra el mandatario el próximo 19 de julio.
La dimisión de Bouluart calmará el conflicto
El presidente de Kunark, Santos Saavedra Vásquez, dijo a La Repubblica que desde el lunes 17 de abril diversas bases de patrullaje en 22 regiones, entre ellas San Martín, Cajamarca, Lambaque, Piura y La Libertad, organizan viajes a la capital.
“El Presidente debe renunciar antes de la Fiesta Nacional, es lo más adecuado en esta crisis política y social. Sin embargo, la presidenta Dina Boluert y el Congreso no quieren ceder el poder a pesar de la negativa de los peruanos”, enfatizó Saavedra.
De igual manera, el gobernador regional de Puno -baluarte de las protestas en el sureste peruano-, Richard Hanko, apoyó el llamado a la comunicación masiva como expresión del sentir del pueblo peruano frente a la crisis política.
Además, consideró que la renuncia de la presidenta Dina Boulouart calmaría el conflicto social que enfrenta el país.