Después de casi nueve meses en la sede diplomática, los solicitantes de asilo hablaron por primera vez el sábado para denunciar que el acoso había aumentado y que “la situación se está volviendo cada vez más crítica”.
Caracas. Los seis disidentes que se refugian en la embajada argentina en Caracas desde marzo viven no sólo una situación desesperada, sino también un “alto riesgo”. Durante meses, a los activistas políticos se les ha negado el paso seguro y se encuentran bajo un asedio constante que se ha intensificado en las últimas tres semanas. Las fuerzas de seguridad de Nicolás Maduro cortaron el acceso a los servicios básicos.
Hablaron por primera vez en casi nueve meses en la sede diplomática el sábado. En conferencia virtual con medios nacionales e internacionales, tres de ellos, Pedro Uruchurtu, Magali Meda y Omar González, denunciaron las críticas condiciones, entre ellas la falta de electricidad y agua potable desde hace semanas. Aseguraron que “la situación es cada vez más crítica”.
Explicaron que el gobierno ha aumentado la presión mediante el uso de drones para vigilancia y francotiradores estacionados alrededor de las residencias. Este asedio busca forzar su rendición. Denunciaron la amenaza de entrada y un importante despliegue de agentes represores.
“Siempre hay hombres armados en la zona, pero la situación se agrava con francotiradores encapuchados, con punteros láser y escondidos entre la vegetación. Nos preguntamos si quieren que ocurra una tragedia”, dijeron. Además, explicaron que las casas cercanas servían como “centros de espionaje”.
Quieren apoyo para que se reconozca su situación y se les permita salir del país. Temen represalias si se quedan en Venezuela.
#Esto es noticia 🇻🇪 “Vamos a cumplir 3 semanas sin luz” | Refugio en la Embajada Argentina: Estamos ante un bloqueo sin precedentes @Magalimeda, @Uruchurtu y @omargonzalez6 Hablaron con los medios internacionales y calificaron el bloqueo del régimen como agotador y… pic.twitter.com/VwXY2Z4r8g
– EVTV (@EVTVMiami) 14 de diciembre de 2024
Los solicitantes de asilo expresaron que la vigilancia y el acoso constantes por parte de miembros armados los hacían sentir como “rehenes”. “Estamos sufriendo un acoso psicológico terrible, no podemos ni ir a buscar agua”, subrayó Meda.
A pesar de las duras condiciones, mantienen contacto con el mundo exterior gracias a un generador eléctrico que utilizan ocasionalmente. Pero su situación es cada vez más desesperada.
Argentina reclama
La Cancillería argentina exigió al gobierno venezolano que proporcione de inmediato salvoconductos para su salida segura del país. La situación se volvió más tensa la semana pasada después de que las fuerzas de seguridad venezolanas detuvieran a un gendarme argentino “sin motivo válido” y en “flagrante violación de sus derechos fundamentales”.
“El Ministerio de Relaciones Exteriores y el Ministerio de Seguridad de Argentina expresan el más enérgico rechazo a la arbitraria e injusta detención del cabo primero Nahuel Agustín Gallo, suboficial de la Gendarmería Nacional de Argentina, por parte de las autoridades venezolanas”, dijo el gobierno. en un comunicado. .
En otro comunicado, el gobierno argentino condenó la “detención arbitraria e injustificada” de un empleado de la embajada local. Dijo que era una violación de los estándares internacionales que garantizan la inviolabilidad de las sedes diplomáticas y la seguridad de su personal.
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