un asesino liberado que supuestamente no habla, pero que luego no puede callar; Un psiquiatra que se masturba observa a su “paciente” tener sexo; Un cura argentino en España que prostituye a sus acólitos y una muchacha que no sabe si elegir a un guapo vendedor de departamentos o a un asesino que la maltrata en cada encuentro… “El Silencio” es una tontería que podría ser divertido precisamente por la improbabilidad de la trama.
La producción, que lleva la firma de Aitor Gabilondo (igual que la propuesta de “Patria”), tiene la siguiente sinopsis: Sergio (Aaron Piper) no habla desde el día que mataron a sus padres. Seis años después, un adolescente puede ser la clave para descubrir toda la historia. Puedes ver el tráiler a continuación:
Si ya lo has visto, probablemente te estés rascando la cabeza, pensando en esa imagen granulada final que nos impide saber con certeza quién se cayó del balcón. Si es así, las siguientes líneas son para ti. Sin embargo, se nos advierte que vienen Revelación.
Todos los caminos llevan a Sergio
Nos dicen que Sergio Sisker fue llevado a un centro especial, donde estuvo detenido durante seis años, por matar a sus padres. La psiquiatra Ana Dusuel (Almudena Amor) deposita su fe en este joven y no solo cree que puede reinsertarse en la sociedad, sino que a través de la investigación -a través del seguimiento con la cámara- puede encontrar información que revele lo sucedido en ese fatídico día.
Pero como podemos ver, Ana tiene sentimientos profundos por Sergio, por eso la historia se vuelve tan complicada. y que ella es la madre adoptiva de Noah (interpretada por Avril Virgez e Irene Vargez), la hermana menor del asesino. Una vez que se descubren estas cartas, armar el rompecabezas es fácil.
¿Sergio mató a sus padres?
Sí, Sergio mató a sus padres. El asesino inventó una historia o se desmarcó de lo sucedido al decir que su padre fue el verdadero autor del crimen. En esta versión, el hombre, que trabajaba para la industria farmacéutica, discutió con su esposa sobre darles medicamentos a los niños y la pelea se intensificó. En cierto momento, el guardián pierde los estribos y empuja a su compañero por el balcón. Una vez que recupera la conciencia, se da cuenta de que lo ha hecho y, abrumado por la culpa, decide suicidarse.
En la versión narrada, Sergio es visto como testigo de los hechos. Pero Noah es todo lo contrario. Él le recuerda que, de hecho, según dictaminó la policía, él fue quien atacó y mató a los padres. Debido a que tenía una enfermedad mental, no tomó su medicación y se volvió violento. No solo eso. Sergio creía que las personas que lo rodeaban no lo amaban, pero su hermana le recordó que eso era mentira. Lo hicieron. Desafortunadamente, la enfermedad que padece le impide mantener la calma y no hacerse daño, ni ver claro su afecto por Noah.
¿Por qué Ana se enamoró de Sergio?
Al comienzo de la serie, vemos a Anna explicarle a Marta (Cristina Covani) que sufre de hibristofilia, un fenómeno conocido como “Síndrome de Bonnie y Clyde”. Es una parafilia (atracción o comportamiento sexual anormal) definida como “la tendencia a sentirse atraído por el crimen, la delincuencia o las personas que tienen tendencia a cometerlo”.
Lo que Anna no menciona es que ella también lo padece. Lo sabemos gracias a su esposo, quien, usando un seudónimo, pudo leer todas las cartas que el psiquiatra le envió a Sergio mientras estaba detenido. Por eso se pierde la profesionalidad durante el ‘estudiar’. Queriendo estar cerca de él en lugar de ayudarlo con la justicia, Anna se enamora del criminal y por eso lo elige a él por encima de su familia, como vemos en la escena final.
¿Quién muere en la última escena?
La respuesta corta es: no lo sabemos. Gabilondo deja que el público decida. La lógica es que después de “volver a la realidad”, desechando la fantasía de que era inocente, Sergio decidiera acabar con su vida. Esto tiene más sentido (aunque no la serie), ya que podría sentir que la única forma de terminar con el dolor que inflige a otras personas es arriesgarse incluso a acercarse a él.
Pero por otro lado, también es cierto que Anna ha sufrido una gran transformación desde que comenzó el experimento y de alguna manera ha mutado o se ha convertido en una cara más de Sergio. Ahora que ha decidido dejar a la familia, que es descubierta por su marido, que ha sucumbido a los delirios del asesino, quizás quiera acabar siendo la primera víctima.
Pero quién muere es irrelevante. Sergio y Ana están condenados al rechazo social. Las decisiones que tomaron los llevaron a ese lugar oscuro, como la muerte misma.