Caracas Al Dia
Miembros de una comunidad cristiana han sido asesinados en el sur de Kenia después de haber sido persuadidos de ayunar Y así la cifra de encuentros con Jesucristo fue de 350, tras el hallazgo de doce cadáveres más este lunes, informaron las autoridades del país.
Según los últimos datos oficiales confirmados por la comisaria de la Policía Regional de la Costa de Kenia, Rhoda Onyancha, y recogidos por los medios locales a última hora de ayer, 613 personas siguen desaparecidas y 95 han sido rescatadas con vida.
Después de que comenzara la cuarta fase de exhumación el lunes, el ministro del Interior de Kenia, Kithure Kindiki, indicó que al menos cuarenta fosas comunes nuevas habían sido identificadas y estaban esperando su apertura en el bosque de Shakahola en el condado costero de Kilifi.
“Perdimos a muchos kenianos cuyo pecado fue seguir y creer a un hombre que creían que era un hombre de Dios (…) Vimos familias de seis y siete personas enterradas en una tumba.“, lamentó Kindiki.
El 27 de junio, el patólogo jefe del gobierno, Johansen Odur, indicó que, de los 338 cuerpos examinados hasta la fecha, 117 eran menores y 201 adultos, mientras que 20 se encontraban en estado de descomposición. Determinación de la edad.
Casi todos los cuerpos de la llamada “Masacre de Shakahola” han sido exhumados de fosas y fosas comunes repartidas en más de 320 hectáreas de bosque.
Las autopsias realizadas hasta el momento han demostrado que si bien todos los cuerpos presentaban signos de inanición, algunos de ellos, especialmente los niños, también presentaban signos de asfixia y asfixia.
En este sentido, la primera investigación de la policía reveló que aunque los fieles querían romper el ayuno, eran obligados a continuar con el ayuno.
Al menos 37 sospechosos han sido arrestados hasta el momento en relación con los incidentes, que han conmocionado al país, incluido el presunto líder de la secta, el pastor Paul McKenzie y su esposa Rhoda Maui.
El juez de la corte de Shanju, en la ciudad costera de Mombasa (sur), Yusuf Shikanda, decidió mantener a McKenzie bajo custodia policial la semana pasada, mientras otorgaba la libertad bajo fianza a su esposa.
De un total de treinta sospechosos que se encontraban en prisión preventiva, el magistrado permitió que once recobraran la libertad en el plazo de tres días y estableció que el resto estaría recluido otros sesenta días, contados a partir del 2 de junio, mientras continuaba la investigación.
A mediados de junio, la fiscalía informó de la muerte de uno de los sospechosos tras iniciar una huelga de hambre mientras estaba bajo custodia y ordenó el traslado de la jueza Shikanda McKenzie y otras personas de la comisaría a la prisión de la ciudad de Malindi (sur).
El magistrado tomó la decisión tras un pedido de la fiscalía ante la debilidad de algunos sospechosos que habían apoyado la huelga de hambre, para obligarlos a comer.
Quienes no pararon de comer fueron McKenzie y un asistente, según información brindada al juzgado.
McKenzie, bajo custodia policial desde el 14 de abril, dirige la Iglesia Good News International.
Pastor, chófer, ya fue detenido el pasado mes de marzo tras ser acusado de provocar la muerte de dos niños en circunstancias similares, pero quedó en libertad bajo fianza. Caracas Al Dia