con una espátula
Luego de cuatro años de congelamiento, el gobierno y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) retomaron las conversaciones hace poco más de un año, logrando grandes avances como la firma del cese al fuego bilateral más largo, pero que actualmente vive su peor momento debido a los secuestros. Padre del futbolista Luis Díaz.
“Tenemos un proceso que ya ha avanzado como ningún otro en la larga historia del conflicto armado y los procesos de paz con estas guerrillas avanzan solos”, resume el senador colombiano y negociador con el ELN Iván Cepeda, quien también es consciente de que ahora el diálogo en sí es un momento “difícil, pasa por momentos duros”.
El ELN se inspiró en la Revolución Cubana de 1964 y hasta 2012 el gobierno colombiano logró sólo reuniones exploratorias. El gobierno de Juan Manuel Santos logró armar una mesa de diálogo y acordar una agenda por primera vez, pero la llegada de Iván Duque en 2018 lo paralizó todo.
“En los cuatro años del gobierno anterior no se dieron pasos adicionales, ahora en un año no sólo hemos reiniciado la mesa, hemos llegado a 15 acuerdos”, afirmó Cepeda.
Entre estos acuerdos, además de la ayuda humanitaria en algunas zonas afectadas por el conflicto y el inicio de la difusión de propuestas de ambas partes a tener en cuenta, también se logró un alto el fuego bilateral de 180 días que comenzó el 3 de agosto. .
Salvo pequeñas quejas, todo parecía funcionar bien hasta que el 28 de octubre fue secuestrado Luis Manuel Díaz, padre de un futbolista del Liverpool, y pocos días después la delegación gubernamental denunció que estaba en manos del ELN, que estaba liberado. Despues de 10 dias.
En momentos “difíciles”
“Como todo proceso, hay momentos difíciles, difíciles y ahora estamos en uno de ellos porque tenemos un debate crítico con el ELN por los secuestros”, admite Cepeda.
La guerrilla admite que esto fue un error y se critica, aunque insiste en que no se trata de una violación al cese al fuego, porque según el comandante de ese grupo, Antonio García, “no hay acuerdo donde el ELN una sus fuerzas”. de libertad, se compromete a no realizar actividades financieras, incluidas
Pero lo cierto es que el secuestro de civiles que no tienen nada que ver con el conflicto -la llamada “toma de rehenes”- es una violación del derecho internacional humanitario (DIH) según los Convenios de Ginebra y, por tanto, está prohibido. Alto el fuego y crímenes de guerra.
El jefe negociador del Gobierno, OT Patiño, pidió la semana pasada una reunión extraordinaria con su homólogo del ELN, “Pablo Beltrán”, pero la guerrilla quiere que la agenda siga como estaba prevista y verse en México en el quinto ciclo general que ya ha iniciado. lugar tomado. Casi un mes de retraso.
Ni siquiera quieren que el secuestro sea uno de los temas discutidos y, si lo es, quieren discutirlo como su estructura de financiamiento.
Sin embargo, Cepeda afirmó que “ni la sociedad colombiana ni ningún gobierno involucrado en este proceso estarán dispuestos a invertir recursos en el financiamiento de una organización que eventualmente, en cualquier momento, retomará su acción militar”.
Voluntad de seguir adelante
El gobierno no quiere dar un ultimátum a la guerrilla y tiene toda la intención de continuar las negociaciones pero, en palabras de Sepeda, está claro: debemos abordar el tema de los secuestros no porque ellos lo quieran, sino porque el pueblo lo exige. . Sociedad.
“Si no, el proceso erosionará su credibilidad, erosionará la posibilidad de unir a muchos sectores de la sociedad colombiana y lo inutilizará en algún momento”, explicó el negociador.
El ELN, por su parte, ha recibido con inquietud la propuesta de una reunión extraordinaria y se mantiene firme en su opinión de que “la aceleración del proceso (de negociación) no beneficia a nadie”, dijo una fuente cercana al grupo. Caracas Al Dia..
En México quieren dar cumplimiento a lo acordado en Caracas en la cuarta vuelta; Continuar definiendo “áreas críticas” para la acción inmediata -como reunirse con la población y brindar soluciones a sus problemas más inmediatos con ayuda humanitaria- y evaluar la fase de participación, cuyo modelo debería estar listo en febrero.
“En teoría (este ciclo) aceita las ruedas”, dijeron.
Para ellos, el gobierno quiere “avanzar en la cuestión de los secuestros para no revelar lo que sucede en la región”, un avance casi militar desde el cese de las hostilidades inspirado por el alto el fuego.
La conclusión, resumida por ambas partes, es que el proceso está “congestionado” pero el gobierno está muy dispuesto a avanzar desde que salió de la mesa, dijo Cepeda, lo que no ha llevado a nada en el pasado.
El ELN saluda las palabras del presidente colombiano Gustavo Petro de seguir preservando el proceso.
Caracas Al Dia