con una espátula
Tiffany Lezama Es una joven del estado Carabobo en el centro de Venezuela. Tuvo una relación con ella durante nueve meses. Kelvin González Y una vez planean su embarazo deciden mudarse a Argentina pero al estar 15 días en el país, ella finge su desaparición para huir y abandonarlo.
“No sé por qué lo hizo, al menos me lo habría dicho para no haber sufrido tanto”.entre lágrimas le dijo a Lejama, quien hoy quiere regresar a su casa pero no tiene dinero para hacerlo. “Todo estuvo genial, no tuvimos ningún problema pero sí preocupación porque tengo 30 semanas de embarazo y no tenemos nada para el bebé.“, dijo a Esreviral.
Se conocen desde 2015, “Primero pasamos por Perú pero no nos fue bien hasta que llegamos a Argentina donde empezó a trabajar como repartidor de bicicletas que nos prestaron. Un sábado se le rompió el celular y al lunes siguiente dijo que iba a buscar trabajo pero no supe nada de él, incluso hice la denuncia a la policía”., comentó la mujer. Incluso el tema de la desaparición fue revelado a través de este medio.
Tiffany cuenta su historia en su cuenta de Instagram tiffalezama_
Hola mi nombre es Tiffany, soy una chica venezolana de 29 años y vengo de una familia humilde de Valencia, Carabobo, estoy recaudando este fondo para poder regresar a casa después de la triste noticia.
Debido a la situación económica de mi país, hace 3 meses mi pareja Kelvin González y yo decidimos migrar a Argentina.
Como no teníamos recursos suficientes para viajar en avión, viajamos en bus desde Venezuela hasta Perú donde pasamos 2 meses recaudando el dinero necesario para continuar el viaje.Hace 15 días llegamos a Argentina y todo salió según lo planeado: Kelvin empezó temporalmente a trabajar como repartidor hasta que encontró algo mejor y yo por mi condición no pude trabajar hasta ahora porque tenía 7 meses de embarazo. Riesgo (presión arterial alta crónica).
El lunes 13 de noviembre, aproximadamente a las 22:40 horas, mi novio salió a buscar trabajo y desapareció; Presenté una denuncia el martes 14 y durante los días siguientes comenzó una búsqueda desesperada en hospitales y morgues.
El 15 de noviembre, sin saber qué hacer, decidí revisar su maleta esperando encontrar alguna pista que me dijera dónde había estado y me encontré con una amarga sorpresa al descubrir que se había llevado toda su ropa, documentos y todo. Nuestros ahorros.
Aún sin saber nada, el 17 de noviembre su padre me llamó para informarle que Kelvin se había puesto en contacto con él, diciéndole “Que estaba bien y que estaba trabajando” Fue una llamada rápida por lo que me dijeron…
Desesperadamente hoy 22 de noviembre acudí a la embajada de Venezuela pidiendo ayuda como un vuelo humanitario o un boleto de repatriación y lamentablemente no me dieron ningún tipo de ayuda o solución.