Los ucranianos celebrarán la Navidad este año el 25 de diciembre, y no el 7 de enero como lo han hecho hasta ahora, como lo hace la Iglesia Ortodoxa Rusa, lo que marca una ruptura con la tradición en medio de la guerra con Moscú.
La nueva fecha para la celebración cristiana, basada en el calendario gregoriano, fue aprobada por el parlamento ucraniano en julio y anunciada por el presidente Volodymyr Zelensky.
“El pueblo ucraniano ha estado sometido durante mucho tiempo a la ideología rusa en casi todos los aspectos de la vida, incluido el calendario juliano y la celebración de la Navidad el 7 de enero”, decía el proyecto de ley.
Pero “el poderoso renacimiento de la nación ucraniana continúa” y “la lucha continua y fructífera por su identidad contribuye a la conciencia y al deseo de cada ucraniano de vivir su propia vida con sus propias tradiciones, sus propias fiestas”, añadió.
La decisión de cambiar la fecha en la que los cristianos celebran el nacimiento de Cristo es parte de una serie de medidas que Ucrania ha tomado para distanciarse de Moscú, como cambiar el nombre de calles y pueblos que evocan la época en que el país obtuvo su independencia en 1991. , era parte de la Unión Soviética.
La ley también ilustra la brecha entre las iglesias de Ucrania y Rusia, que se ha ampliado desde la invasión rusa en febrero de 2022.
La Iglesia Ortodoxa Ucraniana, bajo supervisión religiosa rusa durante siglos, se declaró independiente y “autónoma” del Patriarcado de Moscú en 2019.
La Iglesia ucraniana, leal a Moscú, también declaró su independencia en mayo de 2022, rechazando el apoyo a la invasión ofrecido por el patriarca ruso Kirill.
Un puñado de iglesias ortodoxas, incluidas las de Rusia y Serbia, siguen utilizando el calendario juliano para sus celebraciones litúrgicas y no el calendario gregoriano ideado a finales del siglo XVI.
Durante el régimen soviético (1917-1991), que favorecía el ateísmo, las celebraciones de Navidad se fusionaron con las celebraciones de Año Nuevo, que siguen siendo la celebración principal para muchas familias ucranianas.
En la cena de Navidad, los ucranianos tienen la tradición de servir doce platos sin carne, incluida la “kutia”, elaborada con granos de trigo, miel, pasas, nueces y semillas de amapola.