El gobierno del presidente Joe Biden deportó a Venezuela al teniente Pedro Naranjo Maldonado, quien desertó a Estados Unidos hace un año y medio para solicitar asilo, pero fue entregado a las autoridades chavistas, que lo retuvieron en la prisión de Ramo Verde.
El militar, de 27 años, es hijo del mayor general Pedro José Naranjo Suárez, quien se encuentra preso político desde hace tres años y medio.
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Naranjo Jr. huyó de Venezuela hace un año y medio. Lo hizo con su padre, ambos buscando asilo político. Al principio intentaron conseguirlo en Colombia pero no tuvieron éxito. Luego intentaron postularse en México pero obtuvieron el mismo resultado. En vista de esto, los dos decidieron cruzar el Río Grande el 4 de octubre.
Ya en Estados Unidos, los Naranjo se entregaron a las autoridades norteamericanas para buscar asilo y protección. El padre fue aprobado, pero Naranjo Maldonado no corrió la misma suerte. Pasó dos meses en un centro de detención de inmigrantes y finalmente fue devuelto a Venezuela, donde se inició un proceso legal, informó El Mundo.
En este contexto, la defensora de derechos humanos Tamara Suzu calificó de inaceptable la decisión de Estados Unidos de deportar a Naranjo. “Huyó del país (con su padre) después de que él (el general) fuera torturado y atravesó dos países pertenecientes al régimen”, lo recriminó.
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La madre y la esposa del teniente pidieron a la Casa Blanca que cambiara su postura, pero fue en vano. “Por favor, por favor. Yo temo por su vida, no sé si lo volveré a ver. Y él teme por su vida”, advirtió su madre, María Elena Machado.
Los familiares del soldado señalaron que no se le concedió el estatus de asilo porque no demostró “miedo creíble” durante el interrogatorio.
Pedro Naranjo padre, por su parte, también estuvo detenido en Ramo Verde durante tres años y medio. Estuvo bajo arresto domiciliario durante meses tras ser acusado de sedición y delitos contra el decoro por un presunto intento de frustrar las elecciones presidenciales de 2018, conocido como el caso “Armagedón”.