con una espátula
Los secuestradores de seis monjas detenidas el pasado viernes en el centro de la capital de Haití exigieron 3 millones de dólares de rescate, después de que el propio Papa Francisco solicitara la liberación de las monjas y otras dos detenidas.
Estas son las cifras que barajan los medios locales este lunes y que no han sido confirmadas oficialmente. Con la cantidad exigida por los secuestradores se liberó a ocho personas, entre ellas seis monjas de la congregación de las Hermanas de Santa Ana y un conductor.el cual fue captado en la céntrica avenida Christopher, en las cercanías del Palacio Presidencial.
Lo sucedido fue condenado tanto por el Vaticano como por las instituciones del gobierno haitiano.
¿¿Haití?? estimado ?? Papa Francisco @Pontifex_fr ¿Pide la liberación de 6 monjas de la congregación de las Hermanas de Santa Ana que fueron secuestradas el pasado viernes? #ITPupla #Haití es inseguro #Haití ? pic.twitter.com/yNgtGnvg4h
—Michelle B. Duvalier (@mbduvalier) 21 de enero de 2024
Según la Conferencia Haitiana de Religiones (CDH), los ocho, cuyas nacionalidades no han sido reveladas, fueron secuestrados el viernes cuando se dirigían en autobús a un centro educativo en Puerto Príncipe.
“Estos secuestros son uno más y llenan de dolor y miedo al pueblo santo y de buena voluntad de Haití”. La CRH lo condenó en un comunicado “En este doloroso momento” Todos los cristianos del país están invitados. “Haz una cadena de oración”.
El domingo, después del rezo del Ángelus en la Plaza de San Pedro, El Papa Francisco pide el fin de la violencia en Haitídonde se registró un recrudecimiento de las actividades de bandas armadas, así como la liberación de prisioneros.
“Me entristece enterarme del secuestro de un grupo de personas, entre ellas seis monjas, en Haití. Mientras busco su liberación, rezo por la armonía social en el país”.dijo el Papa, quien instó “Detengan la violencia que causa tanto dolor a esas queridas personas”.
La Oficina Estatal de Protección al Ciudadano (OPC) también condenó en una nota los incidentes, que calificó de incitación a la profanación masiva, y pidió a las autoridades que hagan todo lo posible para liberar a los rehenes, así como “La responsabilidad del Estado de garantizar la vida, los bienes y los ciudadanos sin discriminación”.
Todas las impurezas deben ser erradicadas sin demora.Dijo esta institución, por lo que este secuestro, el último de una larga serie, vuelve a desafiar todas las normas y costumbres porque, además, implica la profanación física y moral de las monjas.
Según la OPC, “Si en el pasado el vestido daba reconocimiento y protección a quienes lo llevaban, hoy está claro que los policías, soldados, monjes, clérigos, profesionales de la salud, autoridades judiciales, estudiantes, estudiantes, extranjeros o diplomáticos, funcionarios internacionales, trabajadores de todos los sectores. , periodistas y trabajadores de los medios de comunicación, nadie es inmune a la bien aceitada maquinaria del secuestro, que alimenta la inseguridad y la corrupción en un contexto de gran confusión”..
En septiembre de 1944, la diócesis de Les Cayes, en el sur de Haití, acogió a las primeras Hermanas de Sainte-Anne de la diócesis de Montreal, que desde entonces han trabajado en el ámbito vocacional, parroquial, educativo, social, de alfabetización y de salud. Otro.
Los secuestros han aumentado en las últimas semanas en Haití, mientras que se han reanudado los ataques de bandas armadas contra vecinos en Puerto Príncipe, dejando a cientos de personas huyendo y a más refugiados en campamentos para personas desplazadas.
Caracas Al Dia