con una espátula
Max Verstappen, actual bicampeón del mundo, ya ha marcado la pauta: en el primer día de pruebas de pretemporada de Fórmula 1, el piloto holandés confirmó su condición de favorito al volar su Red Bull sobre la pista de Saki.
Fue el primero de un test de tres días en el circuito de Bahréin donde la nueva temporada comenzará el fin de semana del 1 al 3 de marzo, a sólo diez días de distancia.
El mensaje de ‘Mad Max’ es claro: a sus rivales les está costando romper la jerarquía de las últimas temporadas. Este miércoles ha ganado más de un segundo al segundo en la tabla de tiempos del día, el británico Lando Norris (McLaren).
El español Carlos Sainz Jr, que afronta su última temporada en Ferrari, completó el ‘Top 3’ de la jornada. La próxima temporada, el piloto madrileño cederá su plaza en la ‘Scuderia’ al siete veces campeón del mundo inglés Lewis Hamilton (Mercedes), que saltará al asfalto el jueves.
En Red Bull, Verstappen probó el coche durante todo el miércoles, al igual que el británico George Russell en Mercedes. Los equipos tienen un solo coche en esta prueba para probarlos.
Russell, duodécimo este miércoles, compartió sus primeras impresiones con el nuevo Mercedes W15, que es “muy diferente” al anterior y “más agradable de conducir que el coche del año pasado”.
El australiano Daniel Ricciardo terminó la jornada en cuarta posición con su Racing Bulls (antes Alpha Tauri), equipo hermano menor de Red Bull. Superó al francés Pierre Gasly, quinto con el Alpine.
Un Red Bull “relativamente nuevo”
En cualquier caso, es difícil sacar conclusiones de este primer día de pruebas. Para ello se deberán tener en cuenta diferentes variables (temperatura del asfalto, nivel de combustible, neumáticos utilizados…) y los equipos priorizarán la información de estos ensayos para ajustar el coche fuera de la hoja de tiempos.
De todos modos, Red Bull no parece haber perdido su ventaja sobre el resto.
“Llegamos a Bahréin con cierta incertidumbre acerca de un coche relativamente nuevo, pero probamos la mayoría de los componentes básicos y tenemos las respuestas necesarias”, dijo Gianpiero Lambais, jefe de ingeniería de carrera del equipo austriaco, que pasó el año pasado. .
Lo único que parecía preocupar a Red Bull a principios de año era una investigación interna sobre su director Christian Horner por “comportamiento inapropiado” con un empleado.
Cuando se le preguntó sobre esto, el jefe de Mercedes, Toto Wolff, pensó que era “un problema para toda la Fórmula 1”.
“Queremos hablar más de deportes que de cosas serias como ésta”, declaró Wolff, quien pidió que la investigación sea “rigurosa”.
“Si todo se hace correctamente, con transparencia y rigor, debemos comprobar los resultados, lo que significa para la lección de Fórmula 1”, añadió Wolff, el único ‘team director’ que respondió a esa pregunta durante una rueda de prensa.
Christian Horner, que se mostró discreto en el paddock el primer día de entrenamientos, podrá hablar con la prensa el jueves. /AFP