El número de muertos por el ciclón extratropical Rio Grande do Sul en Brasil subió a 15 este martes, según el último boletín de la defensa civil del territorio.
También indica que solo falta un residente en la ciudad de Karar de alrededor de ocho mil habitantes.
Datos de la estatal Agencia Brasil indicaron que más de 3.200 personas quedaron sin hogar y unas 300 desplazadas luego de que la poderosa tormenta azotara partes de Rio Grande do Sul y otro estado, Santa Catarina.
Esta última región no registra muertes ni desapariciones por eventos climáticos. Hasta el domingo pasado, los niveles de agua que inundaron los municipios habían retrocedido y las autoridades trabajaron para recuperar las áreas donde ocurrieron los derrumbes.
La Defensa Civil de Río instruye a quienes deseen regresar a sus residencias a verificar primero la situación estructural y de seguridad. “Desinfecte el agua y todos los materiales en contacto con el agua. Si detecta un riesgo, notifique a las autoridades”, advierte la agencia.
El Centro Nacional para la Gestión de Riesgos y Desastres Naturales dijo que el ciclón se había trasladado al mar y que ahora la preocupación sería por las bajas temperaturas a medida que se acerca el invierno.
Alguna literatura especifica que un ciclón extratropical es un sistema de baja presión atmosférica que se origina fuera de los trópicos. Se asocia a frentes fríos y se encuentra en latitudes medias y altas.
Según el Instituto Nacional de Meteorología y el Centro de Pronóstico del Tiempo y Estudios Climáticos, en el Hemisferio Sur, dicho clima adverso gira en el sentido de las agujas del reloj.
Junto con el frente frío, la semana pasada se formó en el océano Atlántico el ciclón que azotó el sur de Brasil.
Las áreas de baja presión y los altos niveles de la atmósfera favorecen la formación de tormentas sobre la tierra, transportando la humedad de los océanos a los continentes.