Según una encuesta realizada por Remitly, uno de los trabajos más buscados por los venezolanos en Google es cómo convertirse en un “YouTuber” o “influencer”. Bloomberg Linia informó este viernes que la profesión ha crecido en el país en los últimos tres años.
“Muchas tienen buen alcance, credibilidad y en general funcionan muy bien para comunicar a un nicho específico, sobre todo cuando no es una acción aislada y la marca lo hace dentro de una campaña multiplataforma que incluye diferentes estrategias y elementos”, comenta la agencia de comunicación. Oficina de medios, especializada en PR digital.
Un TikToker adolescente con más de 4 millones de seguidores puede cobrar hasta $750 por contenido en esa aplicación, según datos de Bloomberg Linear. Un comediante con casi 400.000 seguidores en Instagram puede comprar hasta $550 por varias historias, $100 por un carrete y $720 por una publicación.
Entonces, las ganancias de un influencer se convierten en el principal atractivo de ese trabajo, escribe la periodista Rayleigh Lujan, especialmente en un país como Venezuela, donde el ingreso promedio de un trabajador en el sector privado ronda los $130, según el último estudio de la OVF.
El influencer Fernando Andrés, conocido por sus reseñas gastronómicas a través de su cuenta Qlq, comentó que más allá de los ingresos, la clave es “la percepción de la gente sobre la relevancia de este oficio en la sociedad venezolana”.
“Cuando los medios tradicionales pierden la confianza, los influencers de las redes sociales la ganan, por lo que la exposición y la influencia que pueden crear es comparable a la de un artista o un actor, por ejemplo”.
Haga clic aquí para leer la historia completa en Bloomberg Line.