Caracas Al Dia
Hoy estoy feliz. Daniel Ortega lo sabe, ya que esperó cinco años sin grandes reacciones para desertar de su ex mano derecha en asuntos legales y negociaciones políticas, el juez Rafael Solís Cerda, para confiscar los activos que poseía, incluidas propiedades pertenecientes a familiares cercanos en Nicaragua.
Por Infobae
Desde finales de enero de 2024, el gobierno de Nicaragua ha confiscado al menos seis propiedades pertenecientes a Solís o sus familiares. El 27 de febrero, una patrulla de la policía nicaragüense acudió a la casa de la madre de Solís, Rafaela Cerda, de 93 años, quien fue obligada a abandonar la propiedad “sólo con la ropa que llevaba puesta”.
La ola de confiscaciones contra Solís y su familia se produce casi un año después de que el gobierno de Ortega lo declarara “traidor a la patria” y ordenara que todos sus bienes pasaran al Estado de Nicaragua.
Solís fue magistrado de la Corte Suprema de Justicia de Nicaragua durante 19 años y simultáneamente se desempeñó como representante político del oficialista Frente Sandinista en el poder judicial y en contacto personal con Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo.
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