El líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, prometió el miércoles que Israel pagaría el precio de un ataque al edificio consular de su país en la capital siria, un ataque que mató a siete altos comandantes del ejército iraní, incluidos dos generales.
“Esfuerzos desesperados como los de Siria no los salvarán de la derrota. Por supuesto, también serán abofeteados por esa acción”, dijo el líder iraní después del ataque israelí.
“La derrota del régimen sionista en Gaza continuará y este régimen estará cerca del colapso y la disolución”, dijo Jamenei en un discurso público en Teherán.
Comentó que anhelaba un día en el que “el mundo musulmán pueda celebrar la destrucción de Israel”.
La noche del 1 de abril, el Ministerio de Defensa sirio informó de un ataque aéreo de la Fuerza Aérea israelí contra el Consulado General de Irán en Damasco, que mató al menos a 11 personas. Entre los muertos se encontraban siete oficiales del Cuerpo de Guardias de la Revolución Islámica de Irán (CGRI), incluido el general Mohammad Reza Zahedi, comandante de la Fuerza Quds del CGRI en Siria y el Líbano, y el subcomandante Mohammad Hadi Hajizadeh.
Irán afirma que el ataque fue llevado a cabo por aviones israelíes F-35, que dispararon seis misiles que destruyeron el edificio consular.
El presidente iraní, Ibrahim Raisi, había advertido anteriormente que el “régimen sionista [israelí] “Deben recordar que no podrán lograr sus siniestros objetivos mediante medidas tan inhumanas” y Teherán responderá de la misma manera.
La Liga Árabe también condenó el ataque, calificándolo de “una nueva y grave violación por parte de Israel del derecho internacional, en particular de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas”.