En una reunión que podría marcar un punto de inflexión en la política venezolana, funcionarios estadounidenses se reunieron en secreto con miembros de la administración de Nicolás Maduro.
El diálogo, según informa Bloomberg, busca poner a Venezuela en la mesa de negociaciones para reformas democráticas, en un momento crítico en el que continúa el debate sobre el restablecimiento de sanciones contra la industria petrolera del país.
A la reunión en Ciudad de México asistieron Daniel Erickson, del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, y Jorge Rodríguez, jefe negociador de Maduro. Las discusiones giraron en torno a la situación electoral, un tema delicado y de gran importancia para el futuro democrático de Venezuela.
En una señal de diplomacia regional, el presidente colombiano Gustavo Petro, respaldado por Estados Unidos, se reunió con Maduro en Caracas. La visita no sólo simboliza los esfuerzos por fortalecer los lazos entre los países vecinos, sino que también pone de relieve las preocupaciones internacionales por la exclusión de los candidatos de la oposición en las próximas elecciones.
Estados Unidos ha seguido presionando a los vecinos de Venezuela para que insten a Maduro a reestructurar su gobierno con prácticas democráticas. La reunión de esta semana, que sigue a una reunión anterior en febrero, parece ser un paso adelante en este esfuerzo diplomático.
Aunque la participación de Francisco Palmieri y Jennifer Dascal en la delegación estadounidense ha sido confirmada por fuentes cercanas al asunto, aún deben definirse detalles adicionales sobre la reunión y las próximas elecciones, incluida la presencia de observadores electorales internacionales en Venezuela.