El director general de la Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA), Raffaele Grossi, afirmó este miércoles que “el elemento humano en la diplomacia internacional es crucial” cuando se trata de avances en inteligencia artificial (IA).
Grossi dijo que, a diferencia de la IA, que está “usando” la OIEA, “afortunadamente” hay una persona sentada ahí mirándolos a los ojos, escuchando a otro líder y ofreciendo soluciones mientras es entrevistado vía telemática desde Buenos Aires. , en la reunión anual de la Asociación de Líderes Empresariales Cristianos (ACDE).
El diplomático argentino agregó que “en base a la confianza y la credibilidad van a ser el aspecto humanitario importante del trabajo diplomático”.
Grassi recordó que había sido criticado por reunirse con el presidente ruso Vladimir Putin y su homólogo ucraniano, Volodymyr Zelensky, en medio de las guerras de ambos países; O con los líderes iraníes, en discusiones sobre el programa nuclear del país árabe.
“La función es ir a comunicarse con quienes crean situaciones de crisis o no” y “tener una actitud proactiva para proponer soluciones, para proponer iniciativas que puedan evitar que situaciones graves se deterioren”, afirmó.
En relación al actual liderazgo internacional, Grossi reconoció que “las personalidades pueden ser menos épicas que otros momentos históricos”, lo que argumentó al decir que “hay algunos líderes que despliegan grandes alturas” pero que “ésta es la realidad” con la que deben trabajar. . voluntad y “tratar de ver lo que otros tienen para ofrecer”.
“La diplomacia siempre encuentra la manera”, señaló.
Grossi explicó cómo abordó la reunión con algunos de estos líderes internacionales: “Tengo que tener muy claro que dentro de la estrategia de evitar un accidente nuclear, lo que puedo ganar de la conversación y lo que debo saber, la inteligencia de la organización y Mis inspectores no lo dijeron.”
El diplomático argentino admitió que en esos encuentros vivió “momentos de mucha tensión” y que tuvo que escuchar cosas que “no le gustaron”, pero apeló a la disciplina mental y profesional “para no perder la vista”. “Efe