En un caso médico excepcionalmente raro, una niña de un año en Shanghai, China, murió después de que se descubrió que se había desarrollado un feto en su cráneo.
La pequeña fue hospitalizada debido a la forma inusual de su cráneo y retrasos en sus habilidades motoras. Una tomografía computarizada reveló sombras de tejido blando, hueso y tejido óseo mixto en su área intracraneal. Posteriormente, una craneotomía confirmó la existencia de un feto en desarrollo dentro de su cabeza.
A pesar de la extirpación exitosa del feto, la niña sufrió un daño cerebral irreversible y murió 12 días después de la cirugía.
Este fenómeno, conocido como feto en feto (FIF) o feto parásito, ocurre aproximadamente en uno de cada 500.000 nacimientos y se cree que es el resultado de la absorción de un gemelo durante el embarazo. Aunque los FIF pueden ocurrir en varias partes del cuerpo, la ubicación intracraneal es extremadamente rara y, desafortunadamente, siempre fatal.
Leer también: Insólito: Un hombre intentó entrar a China con más de 100 serpientes escondidas en sus pantalones
En este caso particular, los médicos detectaron una anomalía en el cráneo de la niña durante un examen prenatal a las 33 semanas de embarazo. Sin embargo, una resonancia magnética no proporcionó información concluyente. Al nacer, la pequeña tenía un cráneo notablemente grande y, al año de edad, solo podía decir “mami” y tenía problemas motores, informa Todo Notisius.
La craneotomía reveló un feto inmaduro de 18 cm de largo con características y extremidades malformadas, pero con extremidades y estructura ósea claras.
Investigadores de la Universidad Fudan en Shanghai, donde se discutió el caso, sugirieron que la contaminación ambiental, la genética, las bajas temperaturas y la exposición a pesticidas en las primeras etapas del embarazo pueden ser factores contribuyentes. Sin embargo, aclararon que se necesita más investigación para determinar la causa exacta de este fenómeno.