Caracas Al Dia
“Me sobraron dos cartones de huevos, le preparé todo y como están todos mis compañeros aquí no vamos a dejar nada a los guardias”, dijo un interno del Centro Penitenciario de Oriente, conocido como La Pica. Ubicada en Maturín en el Reino de Monagas antes de la toma de poder.
Y los prisioneros sabían con una semana de anticipación que la prisión sería interferida porque Pran les había anunciado que la prisión sería ocupada.
Los privados de libertad estuvieron toda la semana comiendo sus alimentos y llevándose alimentos de los almacenes que funcionaban dentro del penal, quienes prefirieron entregar mercancías a la población reclusa y no perderlas, porque les aseguraban que los funcionarios serían aptos para la mercadería. en esta situación. Los prisioneros
Sobre tomar La Pica Observatorio Penitenciario de Venezuela (OVP) Supo que el penal de La Pica ya estaba rodeado por funcionarios a las 5 de la mañana, dos helicópteros fueron vistos sobrevolando el penal a las 7:30 de la mañana y la intervención comenzó pasadas las 8 de la mañana.
La Pica es la cuarta prisión tomada por el régimen de Maduro y, como otras intervenciones, no fue una sorpresa, fue negociada y entregada directamente por Pran.
Este complejo penitenciario estaba dividido y dirigido por dos cárceles, la primera donde entrena Monagas y su líder es Pedro González Mata alias “Pedro el Rapidito”, la segunda donde dirige Caro Loco de Cristo y es dirigido por Jefferson Clavizo alias “Jefferson”, ese El lugar donde se alojan juntos el mayor número de presos.
Ambas entidades cobraban una tarifa semanal de $5 en efectivo, para un total de $20 por mes, y se pagaba todos los lunes. Si no lo hacían, eran excomulgados del área de la iglesia y perdían el derecho a viajar por toda la zona. la zona Los delincuentes que infrinjan las reglas pueden ser ejecutados por los salvavidas.
Lo otro que tienen en común Pran “Pedro El Rapidito” y “Jefferson” es que se dedicaban a la extorsión, venta y distribución de drogas y se aliaban con bandas criminales; Ambas vidas cumplieron sus condenas, pero continuaron viviendo dentro de la prisión, aunque entraban y salían como si nada, e incluso durante esta detención, los padres y hermanos de “Jefferson” se encontraban dentro de la prisión, según confirmaron. OVP Varios presos en libertad.
La Pica no se diferenciaba mucho del resto de prisiones donde los presos vivían con lujo. En esta instalación cuentan con dos piscinas, negocio de alimentación y otros animales como cerdos, vacas, gallos etc. Se conoció que los animales no fueron retirados por completo, sino que algunos fueron sacrificados para alimentarse durante estos días de espera.
Pran y sus Luceros tenían acceso a motocicletas y también operaban armas de alto calibre. Según familiares, a él también lo sacaron de la prisión.
OVP Pudo confirmar que dentro del penal vivían mujeres y niños, aunque algunos decidieron salir el pasado domingo 29 de octubre, que fue el último día de la visita, mientras que otros permanecieron con sus seres queridos.
El martes 31 de octubre hubo mucho movimiento de funcionarios, por lo que presos y familiares creyeron que habría una intervención del Ministerio del Interior y del Ministerio de Justicia y Paz, junto con la Guardia Nacional y cuerpos policiales. A partir de ese momento, algunos familiares se instalaron en las afueras del penal y al mismo tiempo los presos iniciaron una vigilia permanente a la espera de la intervención.
Mientras tanto, el jueves por la tarde, los reclusos informaron que sobrevolaron la prisión con drones al menos tres veces y observaron cómo talaban con una máquina el bosque que rodeaba la instalación.
En medio de esta incautación, los familiares de los presos dijeron abiertamente OVP Preocupados por el traslado de estos presos, muchos afirman que no cuentan con recursos para visitar otros estados, por lo que piden ser trasladados al estado Sucre en lugar de ser trasladados a la región más cercana o al Centro de Entrenamiento Nelson Mandela New Man. Situado a escasos metros de La Pica.
Debemos recordar que La Pica cuenta con una medida provisional emitida por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) desde el 9 de febrero de 2006, y que el Estado tiene el deber de garantizar la seguridad e integridad física de las personas privadas de libertad.
Prensa del Observatorio Penitenciario Venezolano