Manifestantes de distintos sectores que protestan desde hace una semana en la provincia argentina de Misiones (noreste del país) cruzan este jueves un control policial en los alrededores de la asamblea representativa de la región en la localidad de Posadas.
Varios videos publicados en las redes sociales mostraron a decenas de manifestantes rompiendo vallas de seguridad a las puertas de la sede de la legislatura provincial en la frontera entre Paraguay y Brasil.
Una gran fuerza policial se desplegó en la puerta del edificio después de que los manifestantes, en su mayoría profesores, entraran por la fuerza.
Los medios locales y nacionales presentes en el lugar informaron del uso de gas pimienta contra manifestantes y periodistas.
En los videos difundidos se puede ver cómo el personal de la Cámara de Representantes de Mission observa la situación desde las ventanas del edificio.
Gobierno de Milli retiene alimentos
El gobierno del ultraderechista presidente argentino Javier Milli ha retenido más de 5 millones de kilos de alimentos destinados a comedores sociales que podrían haberse perdido en los almacenes del extinto Ministerio de Desarrollo Social.
Reveló, al solicitar una solicitud de acceso a la información pública, el periodista Ari Lizalad del portal El Destep, quien detalló que desde diciembre pasado permanecen en el citado almacén productos como yerba mate, leche en polvo, aceite y puré de tomate, garbanzo, harina de trigo y maíz, arroz, guisantes, fideos, verduras, pasas y huevo en polvo con carne, todos ellos en riesgo de caducidad.
Tras conocer esta información, el portavoz presidencial, Manuel Adorni, reconoció la suspensión, argumentando que los alimentos estarían “destinados a (falsos) comedores truchos”, rechazando que beneficia a unos 10 millones de personas de muy limitados recursos.
El citado comunicador señaló que la actual administración no ha procurado más alimentos para estas instituciones desde que asumió el poder, revelando una persecución judicial que se “complementa con una campaña contra líderes sociales que han apoyado durante años este sistema de control social”, quienes “satanizados por el sistema de medios corporativo cuyo negocio Miley tiene que garantizar.”