con una espátula
Luis Rubiales, expresidente de la Federación Española de Fútbol, comparecerá ante los tribunales bajo investigación por presunto “acoso sexual”.
Cinco días después de su dimisión, Rubiales llegó al juzgado madrileño de la Audiencia Nacional para ser interrogado por el juez Francisco de Jorge junto a su abogado.
La audiencia se llevará a cabo a puerta cerrada. Según la reforma del Código Penal español, los besos no consentidos pueden considerarse agresión sexual, con penas que van desde multas hasta cuatro años de prisión.
Además, se baraja un posible delito de coacción, ya que la jugadora Jennifer Hermoso asegura que fue sometida a constantes presiones por parte de Rubiales y su entorno para justificar y aprobar la verdad.
La polémica comenzó cuando Rubiales besó en la boca a Hermoso durante la ceremonia de entrega de medallas en el Mundial de Australia.
La FIFA lo suspendió por 90 días y finalmente, con una denuncia de la fiscalía y un expediente abierto por la justicia deportiva española, Rubiales anunció su dimisión.
Aunque dijo que fue un acto mutuo que no tuvo sexo, Hermoso lo consideró un ataque emocional y machista.
Mientras tanto, la nueva seleccionadora femenina deberá presentar su primera lista de convocados, en un intento de volver a vestir de rojo a las campeonas del mundo tras su dimisión en protesta contra la gestión de la RFEF.
incluyendo información de AFP