El presidente de Estados Unidos (EE.UU.), Joe Biden, admitió que su país envía armas de fuego “peligrosas”, incluidos rifles de asalto, a México.
El mandatario reconoció que su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador, siempre menciona el tráfico de armas de Estados Unidos a México, cuando menciona la necesidad de frenar el tráfico de drogas con fentanilo.
“Estamos enviando armas peligrosas, especialmente armas de asalto, a México. Nos están pidiendo que paremos. Pero, ¡por Dios! Si no somos nosotros, ¿qué somos?”, se preguntó Biden este viernes, durante un discurso en el que instó al Congreso a aprobar medidas para reducir el exceso de violencia que azota al país.
El gobierno mexicano estima que unas 200,000 armas de fuego de los Estados Unidos terminan en México cada año.
Las intenciones de Biden no dan sus frutos
Biden instó a los republicanos que controlan la cámara baja del Congreso a prohibir las armas de asalto y los cargadores de alta capacidad, que permiten a los hombres armados matar a un gran número de personas sin detenerse a recargar las balas.
Pese a las intenciones del Presidente, estas quedan en meras peticiones sin acciones concretas Por el contrario, diversas cortes a lo largo del país continúan mostrando su apoyo al uso y tenencia de armas sin restricción alguna.
Por ejemplo, en febrero pasado, un panel de tres jueces de la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito con sede en Nueva Orleans anuló una ley federal que prohibía las órdenes que prohibían a las víctimas de violencia doméstica poseer armas de fuego, argumentando que el estatuto creaba una barrera inconstitucional. El derecho a llevar este dispositivo mortal.
Los jueces basaron su fallo en la Asociación de pistolas y rifles del estado de Nueva York v. Bruen, una decisión de la Corte Suprema de EE. UU. de junio de 2022 que anuló los límites del estado sobre el porte oculto de esos objetos en público.
En lo que va de 2023, las armas de fuego se han cobrado más de 19 500 vidas en los Estados Unidos, incluidos más de 11 000 por suicidio, según The Gun Violence Archive, una organización sin fines de lucro dedicada a contar la violencia armada en los Estados Unidos.