El productor británico de petróleo y gas BP, la estatal PDVSA y la Compañía Nacional de Gas (NGC) de Trinidad y Tobago están acelerando las conversaciones para desarrollar reservas de gas natural en el Mar Caribe, dijeron a Reuters cuatro personas familiarizadas con el asunto.
El año pasado, las compañías iniciaron conversaciones para desarrollar el campo de gas Coquina-Manakin en la frontera marítima entre Trinidad y Venezuela, que contiene alrededor de 1 billón de pies cúbicos de gas natural.
Las conversaciones han avanzado desde que Estados Unidos aprobó el proyecto en mayo, que exime a Venezuela de sanciones energéticas.
Los equipos ahora están buscando firmar la licencia venezolana necesaria para desarrollar ese lado del campo antes de las elecciones presidenciales del domingo, según Reuters.
Las autoridades venezolanas habían planeado inicialmente una ceremonia de firma de licencia la semana pasada, pero se pospuso porque aún no se había llegado a un acuerdo.
BP, que declinó hacer comentarios sobre el asunto, había dicho anteriormente que estaba buscando activamente desarrollar el campo. PDVSA, NGC y el Ministro de Energía de Trinidad no respondieron de inmediato a solicitudes de comentarios.
BP tiene intención de entregar el proyecto en Trinidad
BP quiere que el gas se utilice principalmente para abastecer el emblemático proyecto Atlantic LNG en Trinidad. Una pequeña porción de la producción irá a NGC para su uso en el sector petroquímico de Trinidad, dijeron ambos a Reuters.
Trinidad es el mayor productor de GNL de América Latina y el segundo mayor exportador mundial de metanol y amoníaco, pero sus industrias se han visto afectadas por la escasez de gas natural en los últimos cinco años. Atlantic LNG tiene capacidad para producir alrededor de 15 millones de toneladas métricas por año (MTPA) de GNL.
La aprobación estadounidense para Coquina-Manakin es la segunda que Washington otorga a proyectos energéticos entre Trinidad y Venezuela que considera claves para garantizar el suministro de gas a los mercados internacionales.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos concedió a Shell una licencia a principios del año pasado para desarrollar el campo de gas Dragón en Venezuela. Se espera que el proyecto comience a producir gas a finales del próximo año.