con una espátula
Los prisioneros rusos enviados a luchar en Ucrania “expian sus crímenes con sangre”, dijo el viernes un portavoz del Kremlin, en respuesta a preguntas sobre un controvertido perdón concedido a un hombre que mató a su ex novia.
Cientos de miles de ex presos, algunos condenados por delitos violentos como asesinato o violación, han sido reclutados en prisiones desde el año pasado para luchar durante meses en Ucrania a cambio de una amnistía.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, defendió la estrategia después de que los medios rusos informaran que Vladislav Kanius, un hombre condenado a 17 años de prisión por el brutal asesinato de su expareja, había sido liberado tras luchar en Ucrania.
“Las personas condenadas, incluso por delitos graves, expían sus crímenes con sangre en el campo de batalla”, dijo Peskov.
El caso Kanius causó revuelo cuando se reveló que el acusado le infligió 111 heridas a su novia, una “tortura” que duró varias horas.
Según Olga Romanova, periodista exiliada -que defiende los derechos de los presos y de los activistas de la oposición en Rusia-, Moscú empleaba a 100.000 combatientes en las cárceles. Esta estrategia se lanzó en 2022 en paralelo para movilizar a cientos de miles de conservadores.
Pero esta estrategia puede ser peligrosa para la sociedad cuando estos ex presidiarios regresen al frente, advierten las ONG. En los últimos meses, la prensa rusa ha informado que los prisioneros liberados han cometido delitos graves.
Kanius, de la región siberiana de Kemerovo, fue indultado por el presidente ruso Vladimir Putin cuando recibió un indulto presidencial en abril de este año y ahora está libre.
“Es decir, Putin perdonó a un asesino (…) Ella (Vera Pejteleva) tenía 111 heridas en el cuerpo (entre heridas, puñaladas y otras lesiones). Antes de morir, violó a Vera y luego la estranguló con una cuerda de hierro”, dijo la activista Alena Popova en su canal Telegram.
Además, recordó que la ley actual permite la liberación de prisioneros de guerra o de confederación por tales delitos, pero sólo después de recibir una medalla u orden estatal o después de abandonar el servicio por edad.
Según el diario digital Meduza, Oksana, la madre del estudiante asesinado, se enteró de la liberación del delincuente luego de ver una foto de Canius camuflado en las redes sociales.
“Mi hija, perdóname, se está pudriendo bajo tierra. Me quitaron la vida. Es una bofetada para mí y para las madres cuyos hijos han sido brutalmente asesinados. “Somos muchos en todo el país y no sabemos qué hacer”, comentó.
Y añadió: “¿Alguien puede explicarme cómo puedo sobrevivir? Este monstruo, libre de cargos criminales, (…) puede matar a cada uno de nosotros, la víctima, en cualquier momento en venganza”.
La fiscalía informó a la familia de la estudiante sobre el indulto, mientras que los servicios penitenciarios se negaron a informarle de su paradero.
Vera fue brutalmente asesinada por Kanius en enero de 2020 cuando fue a recoger sus pertenencias a su apartamento tras su ruptura.
(Con información de AFP y Caracas Al Dia)