El Partido Comunista de Venezuela (PCV), otrora principal aliado de Hugo Chávez y su proyecto político, fue intervenido por la Corte Suprema de Justicia la noche del viernes 11 de agosto.
Esta agrupación política, la fuerza más antigua del país, forma parte del chavismo desde su nacimiento, pero ahora sufre las mismas represalias que han vivido los opositores más radicales a esta ideología.
Desde mediados de 2022, voceros de partidos políticos han alzado la voz en contra de algunas de las medidas económicas adoptadas por el gobernante Nicolás Maduro para flexibilizar la regulación y dar más espacio a las empresas privadas. Esto, contrario a las ideas del PCV, llevó a la publicación de las primeras declaraciones críticas ante el sistema de gobierno venezolano.
El Partido Comunista de Venezuela y la ruptura en La Habana
Fue en La Habana, Cuba, en octubre de 2022, cuando el PCV tomó una posición más adelantada. Los anuncios del líder Héctor Rodríguez en el marco del XXII Encuentro Internacional de Partidos Comunistas y Obreros resonaron entre los asistentes que se mostraron sorprendidos.
“Venezuela hoy es una experiencia concreta que revela los límites del progresismo. De la política antiimperialista: la nacionalización de sectores estratégicos, la lucha contra la gran propiedad y la defensa de los derechos sociales y laborales, se pasó bruscamente a una agenda económica liberal de privatizaciones”, dijo Rodríguez en la capital cubana frente a los principales empresarios y defensores del comunismo.
Las palabras del líder comunista provocaron reacciones mixtas. Diosdado Cabello, el número dos del chavismo y primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), fue uno de los que expresó su rechazo a la dirección del PCV y dijo que tenía dudas sobre si el partido “era un partido real”.
Cabello afirmó que el PCV se había “entregado al imperialismo” e insinuó que no había democracia interna en el grupo.
Hace unas semanas, el secretario general del PCV, Óscar Figuera, alertó sobre una posible “estrategia antidemocrática” que adoptaría el gobierno venezolano para hacerse con el control del partido político.
Sin embargo, no fue sino hasta el 13 de junio de 2023 que algunos líderes políticos iniciaron una campaña afirmando que la dirección nacional del PCV era ilegítima.
Henri Parra fue el encargado de liderar esta estrategia y se presentó como miembro del PCV, aunque la dirección del partido aseguró que había sido expulsado meses antes. Oscar Figueroa lo cataloga como mercenario e insiste en que, al no ser miembro del PCV, “no tiene capacidad legal para emprender acciones legales en su nombre”.
Henry Parra Magistrado de la Corte Suprema
El líder político Henry Parra, quien dice ser miembro del Partido Comunista de Venezuela, acudió a la Corte Suprema el 10 de julio. Allí, junto a un grupo de personas, Para dijo que apeló a la intervención del partido. “Llamo a las bases a la rebelión”, dijo Para a los medios.
Henri Parra sostiene que el congreso que realizó el PCV para elegir la dirección nacional en 2022 “fue excluyente y solo participó una minoría de comunistas”.
En este momento se solicitó la intervención del partido y el nombramiento de una junta ad hoc. Un mes después su pedido se hizo realidad.
La advertencia y apoyo de Oscar Figueroa a la oposición venezolana
El secretario general del PCV, Óscar Figuera, no dejaba de llamar la atención sobre la posible injerencia del partido. Desde principios de 2022, Figueroa insistió en que fue ignorado en la Asamblea Nacional y que sus intervenciones no fueron difundidas por los medios estatales.
Figueira y el partido critican el accionar económico del gobierno de Nicolás Maduro, pero las declaraciones en La Habana cierran la ruptura de esta relación histórica entre el chavismo y el PCV.
La dirección de la agrupación política no pertenece a la oposición venezolana, sin embargo, rechazó la inhabilitación impuesta a María Corina Machado y publicada el pasado 7 de agosto. También se pronunció en contra de la declaración del gobernador Trujillo, quien aseguró que cualquiera que fuera en contra de la línea del PSUV y entrara en la entidad andina sería “golpeado”. Dos días después, la propia María Corina Machado agradeció el apoyo del PCV en un mitin.
El mismo día, viernes 11 de julio, el PCV emitió un comunicado en el que rechazó las ideas políticas de Machado.
“El PCV ha condenado reiteradamente las actividades políticas de María Corina Machado como agente de los intereses imperialistas en Venezuela”, dice el comunicado.
Sin embargo, el mismo documento rechazó una “campaña de manipulación” del gobierno-PSUV “encaminada a interferir con el PCV y subordinarlo a sus intereses”.
Horas después de esta publicación, la intervención del PCV fue anulada por un juez de la Corte Suprema.