La vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delsey Rodríguez, durante un evento en Bolivia, acusó este lunes a Estados Unidos de cometer “genocidio económico y social” por las sanciones impuestas contra su país.
“Un genocidio económico y social que se ha cometido contra Venezuela y por eso hoy vemos el genocidio contra Palestina como una extensión del mismo principio que destruye a la humanidad, destruye a las personas y al capital especulativo que sobrevive de manera escandalosa”, dijo. .
Vicepresidente de Venezuela asiste a seminario ‘Nueva Arquitectura Financiera Regional’. Desafíos para una mejor integración en un mundo cambiante Organizado por la Escuela Plurinacional de Gestión Pública de Bolivia (EGPP) en la oriental ciudad de Santa Cruz.
Rodríguez dijo que actualmente el sistema financiero internacional “está controlado por Estados Unidos, de tal manera que se ha convertido en uno de los más sutiles instrumentos de agresión económica que la ‘hegemonía’ tiene hoy en el mundo”.
Las autoridades consideran “necesario” el diseño de una nueva arquitectura financiera regional para evitar el “desarrollo” de lo ocurrido en su país, que ha sufrido “uno de los peores asedios” en cinco años.
Según el vicepresidente venezolano, en el mundo se han implementado más de 26.000 “medidas coercitivas unilaterales”, de las cuales 930 recayeron sobre Venezuela.
Según él, Estados Unidos utiliza estas medidas “como medio de chantaje” contra los países que “no respetan sus directrices”. La vicepresidenta añadió que ésta, junto con la guerra, se había “convertido en el eje central de la política exterior” de la nación norteamericana.
Rodríguez advirtió que si otros países siguen “sujetos a la hegemonía estadounidense para el sistema financiero internacional”, será “muy difícil” crear una nueva arquitectura financiera internacional donde no pase lo que le pasó a Venezuela, que casi desaparece en un segundo. El 77% de ellos son corresponsales internacionales.
El impacto económico para Venezuela por las sanciones impuestas entre 2015 y 2023 supondría el cese de una producción de alrededor de 3.400 millones de barriles, el equivalente a 232.000 millones de dólares, una caída del “99% de sus ingresos”.
Para Rodríguez, “el engranaje que se creó para el bloqueo en Venezuela” se basó “en el reconocimiento del nombre inapropiado del gobierno en Venezuela”, en referencia al reconocimiento en 2019 del entonces jefe de la Asamblea Nacional venezolana, Juan Guaidó, como presidente “provisional” del país.
El vicepresidente de Venezuela consideró una “medida criminal” para “robar la riqueza de Venezuela”.
Aseguró que ahora el “pueblo venezolano, solo y en una gran unión nacional” está enfocado en la recuperación del país, lo que, dijo, se ve a partir del segundo semestre de 2021, “donde comienza la recuperación de la economía venezolana”. ” Aunque todavía está “bloqueado”.
Además de Rodríguez, en el evento participaron exlíderes de izquierda como Alberto Fernández de Argentina, José Luis Rodríguez Zapatero de España y Ernesto Samper de Colombia, así como el excandidato presidencial chileno Marco Enríquez-Ominami, quien fungió como coordinador. del grupo de Puebla.