Se cumplen 532 años del 12 de octubre de 1492, cuando se celebraba el Día de la Resistencia Adivasi, la diputada Karila Aray, representante de la comunidad Adivasi en el Parlamento, expresó en la sesión general celebrada este jueves que la hora de los Adivasis ha llegado y nunca más someterán a sus hijos e hijas a “la mentira, la desunión, el egoísmo, la ceguera espiritual, el fascismo, ¡no dejaremos que los espejos reflejen lo suficiente!”, expresó.
Así lo gritó el delegado, al presentar el proyecto de acuerdo por el cual la Asamblea Nacional autoriza la conmemoración y exigencia del 12 de octubre de cada año como Día de la Resistencia Indígena en todo el territorio nacional, “con el objetivo de avanzar junto a los pueblos indígenas. Y las comunidades, en líneas estratégicas de independencia integral y descolonización, promueven el enriquecimiento y la educación frente a las normas organizativas indígenas para contribuir a la consolidación de la patria grande.”
El segundo planteamiento del parlamentario incluyó un llamado al Pleno a “apoyar y reivindicar la autoafirmación americanista por la unidad y la diversidad cultural, en un espíritu de civismo, paz y diálogo, para fortalecer a los pueblos indígenas con su aporte como pueblo de Justicia”.
El parlamentario indicó que los pueblos indígenas desde Guyana Esquiba hasta Julia conservarían la soberanía.
“Basta de espejos, la riqueza de nuestro país son nuestros hijos e hijas. Por eso, hermanos y hermanas, la resistencia original, la resistencia ante los reclamos del enemigo histórico de nuestro país, la ofensiva original, para lograr la victoria, para que no muera la esencia de que los venezolanos sean libres, soberanos e independientes. Nuestras selvas, nuestras islas, nuestras montañas, nuestros mares, nuestras riquezas son de los venezolanos”, subrayó.
El representante de la etnia Warao enfatizó durante su intervención que los colonizadores nunca más podrán creer que son dueños de Venezuela y del papel de los indígenas en la construcción de un país.
“Es sumar y sumar a la organización social, a la economía comunal, a la formación y reconstrucción de nuestra propia historia”, expresó.
Advirtió que es nuestro deber alzar la voz para combatir las acciones intervencionistas y neocoloniales que llevan a cabo los gobiernos de Estados Unidos y la Unión Europea, mediante la imposición de medidas coercitivas unilaterales ilegales, “que constituyen crímenes de lesa humanidad, “Dañando los derechos humanos de los pueblos indígenas, quienes son la población más vulnerable a lo largo de nuestra historia”.