El ejército de Sudán se ha retirado de la mesa de negociaciones con el grupo rebelde Rapid Support Forces (FAR), y ambos bandos opuestos están mediando para extender un alto el fuego militar.
Según un comunicado del Comando General de las Fuerzas Armadas de este miércoles, en el que argumentaron violaciones al “cese el fuego por parte de milicias rebeldes”, acusaron a las FARC de “no cumplir con los términos del acuerdo” y continuaron. violar el alto el fuego”.
Ambas fuerzas rebeldes han estado manteniendo conversaciones informales en la ciudad saudita de Jeddah desde principios de mayo. El 21 de este mes firmaron un alto el fuego que permitió la ayuda humanitaria y el restablecimiento de los servicios esenciales dañados por el conflicto en las principales ciudades del país africano.
Tras la declaración del ejército, las fuerzas paramilitares de las FAR dijeron que mantenían su apoyo “incondicional” a la iniciativa de alto el fuego entre Estados Unidos y Arabia Saudita, informó AP.
Desde mediados de abril, Sudán registra feroces combates en sus principales ciudades, especialmente en la capital, Jartum, entre las tropas de las FAR dirigidas por el general Mohamed Hamdan Dagalo y el ejército del país dirigido por el general Abdel-Fattah Burhan. Dos facciones militares luchan por el control del poder del gobierno en el país.
Falta de respeto al alto el fuego
Los residentes de Jartum informaron de enfrentamientos el martes por la noche, así como en la ciudad vecina de Omdurman, a pesar de la renovación de un alto el fuego de cinco días durante el fin de semana.
Un comunicado emitido por quienes los acompañaron a la mesa de negociación indicó que los militares realizaron ataques aéreos, mientras que las FAR ocuparon viviendas y confiscaron algunos bienes.
“Fueron sustraídos combustible, dinero, insumos de ayuda y vehículos pertenecientes a un convoy humanitario, y los robos ocurrieron tanto en áreas controladas por el Ejército como por las FAR”, agregó.
“Sin solución militar”
El presidente de la Comisión de la Unión Africana (UA), Moussa Faki Mahamat, advirtió el sábado que “no hay una solución militar”.
“Los rebeldes deben cesar el fuego de inmediato, permitir la acción humanitaria, la transición política inclusiva y la gobernabilidad democrática dirigida por civiles en Sudán. No hay una solución militar”, dijo Mahamat Au en una reunión telemática del Consejo de Paz y Seguridad.
Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) de las Naciones Unidas, unas 425.500 personas huyeron del conflicto a los países vecinos. Egipto alberga el mayor número de refugiados con más de 175.500, seguido de Chad con unos 114.700 y Sudán del Sur con más de 85.200, dijo la OIM.