La excusa para no trabajar en asfalto es la falta de presupuesto, entonces la falta de las mismas carreteras significa zonas a las que nadie quiere llegar.
Guaguay. En el municipio de Carlos Arvelo las vías son un desafío constante. Hay zonas donde los coches pequeños no pueden llegar, excepto en casos excepcionales Con los camiones expuestos a un riesgo considerable.
Las motocicletas, aunque arriesgadas, se ha convertido en un medio La forma de transporte más común.
Esta situación no es nueva. él abandonar el camino Muchas empresas han desaparecido de las zonas rurales.
Por ejemplo, comunidades como El Trompillo, La Sapera, Altamira, Copeton y El Aleton. 15 años esperando solución Aunque se han realizado algunas intervenciones superficiales ocasionales en el camino a Belén, la conexión con esta zona sigue siendo incierta.
El punto divisorio está en Las Colonias, Fácilmente identificable por un monolito con el nombre de la ciudad.
Hay tránsito constante de góndolas al desviarse hacia la vía a Belén. Las colonias se pierden. Vehículos Allí, el camino se cubre de hojas secas y se convierte en una ruta que mucha gente recorre a pie.
Escombros sobre el asfalto
Doris Díaz, residente de Altamira, dijo que después de pasar la escuela La Sapera tiene que caminar al menos 30 minutos. él El viaje comienza plano, Pero luego sube por una carretera donde el asfalto parece un rompecabezas sin terminar.
más tarde, desaparece por completo, Los restos transformados en un camino de tierra lleno de cemento indican que alguna vez existió un camino.
su equipo Crónica. Uno Confirmó las condiciones mientras caminaba. Este capítulo. La maleza cubre partes del terreno, lo que obliga al vehículo a zigzaguear a una velocidad máxima de 20 kilómetros por hora para evitar daños.
Irónicamente, en algún momento es seguro correr por terreno de tierra en lugar de asfalto y tramos rotos de cemento.
El abandono es evidente. Sólo unas pocas motos, de vez en cuando y desorientadas por el tráfico de la zona, transitan por el lugar. Según Doris, casi nadie se arriesga a utilizar un coche, salvo algunos jeeps.
Dependencia unidireccional
Todas estas comunidades Dependiente de este camino Para llegar a la cabecera municipal de Güigüe. Los residentes de zonas remotas como El Aletón deben tener una motocicleta o depender de mototaxis, que cuestan entre $3 y $6 dependiendo de la distancia.
Crónica. uno llego Altamira, pero no pudo avanzar hasta El Aletón, a unos 20 kilómetros de distancia, por las condiciones inhóspitas. Google Maps tampoco reconoce carreteras fuera de Altamira.
Manaure: Aún más aislada
Del otro lado del cerro, la comunidad de Manaure enfrenta una situación más complicada. Oswaldo Gutiérrez, vecino de Central Tacarigua, dijo que El Estiércol, alguna vez el centro de la fiesta del trigo, Está prácticamente aislado.
Carretera que conecta Peñas Negras representa una degradación total. Según Thomas Morillo, vecino de la zona, incluso los pasos de peatones son peligrosos.
Esta situación afecta directamente a comunidades agrícolas como Barbasco, Las Palmas y Juanicero, cuyas El negocio está colapsando. Algunos atribuyen el abandono a la época del gobernador Luis Felipe Acosta Carlez; Otros, desde que el partido gobernante llegó al poder.
Las autoridades, dicen los residentes, Suelen esconderse detrás de la escasez. Presupuesto, pero los recursos se concentran principalmente en Güigüe y el centro de Tacarigua.
Colapso de la infraestructura
En 2023, un fracaso marginal Los 2.300 contactos restantes Abonar a la gente durante varios meses. En febrero de 2024 colapsó el puente que conecta el sector Las Piedras, agravando la situación.
Alexis Pérez, portavoz del área, denunció que Los residentes deben resolver Cuestiones de autogestión.
Pérez también señaló que Los animales evitan el tránsito. zona, ya que sus piernas resultaron heridas debido al mal estado de la carretera. Los 33 km desde Las Piedras hasta Tacarigua Central se encuentran completamente desiertos.
Por ejemplo, Las Juanicaras lleva el puente. 10 años esperando solución, Y la falta de acceso significa que nadie quiere llegar a la zona.
trabajo insuficiente
En junio, la alcaldía de Carlos Arvelo reunió equipos para atender las fallas del borde en Manaure. sin embargo, Esto no incluye reparaciones. Se necesita asfalto con urgencia para normalizar la situación. Por ahora, las expectativas de soluciones concretas son bajas, lo que deja a las comunidades en el olvido.
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El alcalde Carlos Arvello prometió reconstruir un dispensario para Altamira, pero sólo ha habido abandono.