con una espátula
Estados Unidos condenó el ataque hutí al barco Rubimar, hace unos días, que provocó una “catástrofe medioambiental”. El barco está “anclado pero levantándose lentamente” después de sufrir daños “significativos” por “ataques imprudentes y no provocados por terroristas hutíes respaldados por Irán” que resultaron en un “derrame de petróleo de 18 millas (29 kilómetros)”. Así lo indicó el Comando Central de Estados Unidos (CENTCOM) en un mensaje.
por Europa Press
“Los hutíes siguen mostrando desdén por el impacto regional de sus ataques indiscriminados, que amenazan la industria pesquera, las comunidades costeras y las importaciones de alimentos”, agregaron desde Washington.
El domingo por la noche, entre las 9:30 y las 10:40 p.m., los rebeldes yemeníes lanzaron su ataque contra el granelero M/V Rubimar, de bandera de Belice, propiedad del Reino Unido, que navegaba por el Golfo de Adén. En ese momento, el barco transportaba más de 41.000 toneladas de fertilizante IMDG clase 5.1, que es muy peligroso y “aún puede derramarse” en el Mar Rojo.
Momentos después del impacto, la tripulación tuvo que evacuar y se suspendió la marcha. Así, flota en el agua mientras los operadores exploran opciones en el sentido contrario a las agujas del reloj, ya que poco a poco el agua comienza a filtrarse en él.
Este jueves, dos fuentes marítimas aseguraron que remolcar el buque hasta Yibuti sería la mejor opción y que “cualquier reparación o recuperación sólo será posible de forma inmediata”. “Es muy arriesgado que un barco se aleje demasiado o se adentre en aguas más abiertas en estas condiciones”, agregaron.
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