El festival Viva Venezuela pretendía contar con la participación de 214 agrupaciones en 10 días (en Caracas, La Guaira y Miranda), pero la exigencia de cultores, artistas y fraternidades fue tal que superaron los números: pudieron mostrar sus habilidades. Y el amor por nuestro patrimonio en 87 espacios, 353 presentaciones comunitarias y cerca de 600 grupos en 65 conciertos de 23 estados.
Y no sorprende, pues el ministro de Cultura, Ernesto Villegas, mencionó en conferencia de prensa que sólo en el censo se registraron más de 516 mil cultores, entre ellos 80 mil grupos artísticos y más de 100 mil artesanos.
Por eso la fiesta continúa: el festival se trasladará del 14 al 23 de junio a los estados Aragua, Carabobo y Cozedes para mostrar el potencial cultural.
“Carabobo con sus tambores de San Milán; Aragua con sus tambores costeros y todos sus instrumentos musicales y prácticas tradicionales como los Diablos Danzantes y San Juan Bautista; y Cojedes también con sus Diablos y su joropo lanero, también serán sede de nuestra diversidad”, dijo Villegas.
Los organizadores del evento también dieron su perspectiva sobre la primera edición del festival: Luisana Pérez destacó la importancia de los 10 días que se convirtieron en un evento cultural dedicado a nuestra cultura popular; Mientras que Benito Iradi reconoció que este evento tiene la particularidad de tener una sociedad multinacional y multicultural.
Por su parte, Noel Márquez destacó que gracias a los encuentros realizados con culturalistas se está consolidando una estructura para darle continuidad a los acuerdos hechos con el Ministerio de Educación respecto a los Viernes Culturales: “Las escuelas se ocuparán de manera estructurada y organizada. La Gran Misión Viva Venezuela no es sólo un escenario o un solo evento cultural, es una acción permanente expresada a través de la voluntad política expresada por el Ministerio de Cultura y por el equipo de campaña”.
Ana Cecilia Loyo y Javier Marín hablaron sobre la manifestación y la proyección de grupos tradicionales, mientras que Aracelis García aplaudió el esfuerzo de figuras culturales y el apoyo del Estado, además del latido del Movimiento Corazón Artesanal, “que late fuerte y gozando de perfecta salud.”
Francisco Pacheco dice que el éxito del festival se debe a que los cultistas lograron registrarse; Lisbeth Villalba habló de su gran misión en el proceso de formación e Ignacio Barreto destacó que el espíritu y el amor por la patria se fortaleció con el festival.