con una espátula
Fiscal General de Guatemala, Consuelo Porras, quien lanzó un ataque judicial que amenazó la toma de posesión del presidente Bernardo Arévalo, negó haber renunciado a su cargo este miércoles y haber asistido a una citación del nuevo presidente.
“Quiero enviar un mensaje claro y contundente al pueblo de Guatemala y al Presidente de la República para informarles que respeto las leyes del país y que por lo tanto acataré el mandato constitucional de cuatro años (…) y que por eso no dimitiré”, publicó en la red social, dijo el fiscal en un video.
Unas horas más tarde, Arévalo informó que había emitido una nueva citación a Porras para asistir a la reunión de gabinete del lunes, diciendo que estaba obligado por ley a asistir.
El 18 de enero, cuatro días después de asumir como presidente, Arévalo envió una carta al fiscal general convocándolo a una reunión con él, donde se esperaba que le pidiera su renuncia como había anunciado previamente.
Porras evitó presentarse a la citación de este miércoles y vistiendo una blusa de banquillo, una chaqueta verde y un pañuelo con rosas, publicó un video en redes sociales en el que negó haber renunciado y dio una explicación jurídica de su decisión.
“Institución Autónoma”
Porras fue designado fiscal general en 2018 por el entonces presidente Jimmy Morales para un mandato de cuatro años, y en 2022 fue designado por su sucesor Alejandro Giamattei para un segundo mandato, que finaliza en 2026.
“La Constitución es clara en esto y establece un mandato legal que debo acatar, por lo que usted, como autoridad suprema de la nación, debe respetar lo establecido en la Carta Magna y las leyes del país”. El fiscal insistió con un gesto de firmeza con las manos.
Además, Porras afirmó en tono enérgico que el Ministerio Público (MP, Fiscalía) “no está sujeto a ningún poder del Estado porque es una institución autónoma e independiente, lo que garantiza no injerencia en el ejercicio de sus funciones”.
“Ninguna autoridad puede instruir al titular del Ministerio Público o a sus subordinados sobre cómo conducir investigaciones penales o militares, salvo en la facultad que la ley confiere al tribunal de primera instancia”, subrayó.
Dijo que actuaría conforme a las leyes del país y por lo tanto “convocar, invitar o asistir a reuniones para discutir el proceso investigado constituiría un incumplimiento de las disposiciones legales y constitucionales vigentes”.
“demanda masiva”
Sin embargo, Arévalo informó que había cursado una nueva invitación a Porras para asistir a una sesión del Consejo de Ministros, diciendo que de no asistir estaría violando la Ley Orgánica del Ministerio Público.
“La ley lo obliga [a asistir]”No queda otra opción, si no asiste estará en incumplimiento de su deber, por eso sabemos que asistirá a esta reunión del Consejo de Ministros el lunes”, dijo el presidente a la prensa en tono tranquilo. conferencia
“El Fiscal General es una persona autorizada internacionalmente para participar en redes de corrupción; El reclamo de su renuncia es un reclamo generalizado dentro de la sociedad guatemalteca”, concluyó Arévalo.
ofensivo
Porras, de 70 años y clasificado como “corrupto” y “antidemocrático” por Estados Unidos desde 2021, ha sido acusado por Arévalo, manifestantes y la comunidad internacional de “socavar” la democracia y poner en peligro la transición presidencial con sus cuestionables investigaciones.
La fiscalía inició un acoso judicial contra Arévalo después de que lo sorprendieran al colarse en la segunda vuelta electoral de junio.
También logró que un juez suspendiera al equipo Semilla de Arévalo en 2017 por acusaciones de formación ilegal.
Todas estas acciones fueron calificadas por Arévalo como un “golpe de estado” para impedirle asumir la presidencia.
En respuesta, Porras instó al presidente a “detener su retórica anticorrupción y hacerla realidad para los ciudadanos de Guatemala”.
“Presentar denuncias con pruebas propias de cualquier acto de corrupción, las cuales serán investigadas sin excepción”, dijo el fiscal.
AFP