Tras los resultados de las elecciones presidenciales, la oposición ha seguido presionando para que Nicolás Maduro encuentre una salida, como él mismo ha dicho, mediante negociaciones serias. Eso no es posible, según Jesús Seguías, analista y presidente de Detincorp.
En este punto podría entrar en juego una propuesta realista de un escenario “win-win” para el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición, señaló Seguias en entrevista con la VOA. Según él, este acuerdo no significa rendición ni capitulación de las partes.
Sin embargo, cree que el Gobierno no estará abierto a conversaciones “con nadie” hasta que “el nivel de insurgencia civil haya finalizado con éxito” en las calles ante una posible derrota.
Maduro podría abrirse a conversaciones sólo cuando las protestas, que han tomado por sorpresa al gobierno, hayan amainado, señaló Seguias. Según él, el oficialismo exigirá la exclusión de estos diálogos de María Corina Machado, líder de la oposición acusada de piratear el sistema electoral.
Seguias destacó que todavía parece demasiado “prematuro” decidir hacia dónde conducirá la crisis electoral de Venezuela: “Este es un momento importante”.
Por su parte, Mariano de Alba, abogado especializado en derecho internacional, cree que la diplomacia debe intentar mantener “abiertas” las líneas de comunicación con el Gobierno y la oposición en Venezuela.
“La diplomacia no existe sólo para que los gobiernos tomen una posición, sino para tratar de contribuir a crear soluciones”, anunció vía web.
La mediación o negociación y la implementación efectiva de un acuerdo final dependen en gran medida de la voluntad de las partes venezolanas.
“En ese sentido, el margen para la diplomacia parece limitado en este momento. Pero para resolver la crisis político-electoral, la diplomacia debe continuar y estar alerta ante cualquier laguna”.