con una espátula
Según el informe anual presentado este jueves por la organización no gubernamental Observatorio Venezolano de la Violencia (OVV), este año se registraron en Venezuela 1.956 asesinatos, un 15,9% menos que en 2022, cuando contabilizó 2.328.
Con este total, la tasa de homicidios se ubica en 7,5 por cada 100.000 habitantes, explicó el director del OVV, Roberto Briceño Leone, durante la presentación del balance proporcionado a través de la plataforma Zoom.
Además de los asesinatos, se registraron otras muertes, con lo que el número total de “muertes violentas”, según el catálogo de la ONG, ascendió a 6.973, sumando 953 casos de “injerencias policiales” y otros que perdieron la vida. 4.064 muertes que están bajo “investigación”.
En esta última línea, indicó Briceño León, entre otros factores se agrupan a los fallecidos por las fuerzas de seguridad o víctimas de accidentes de tránsito, pero sus casos no están del todo esclarecidos.
Así, la tasa global se sitúa en 26,8 muertes violentas por cada 100.000 habitantes, casi nueve puntos menos que en 2022.
Entre las regiones con más homicidios, Delta Amacuro (Noreste) lidera la estadística nacional, con una tasa de 16,1, seguida de Caracas, 13,4, y Sucre, ubicada en el frente del Mar Caribe, con 12,6 homicidios por cada 100.000 habitantes.
El investigador destacó que dos cuartas partes de las muertes violentas registradas siguen siendo “de causa indeterminada” y “dos tercios de las víctimas de homicidio tenían entre 15 y 44 años”.
De igual forma, destacó que en 37 de los 335 municipios del país el número de muertes por intervención policial es superior a los homicidios, como es el caso de Baruta, Caracas.
Venezuela registró un pico de violencia en la última década, cuando alcanzó una tasa de homicidios de 90 por 100.000 habitantes, o unas 30.000 muertes violentas al año, situación que ha comenzado a mejorar en los últimos cinco años.
Caracas Al Dia