El Observatorio Penitenciario Venezolano (OVP) condenó las condiciones de acoso, extorsión y aislamiento de los presos políticos en Yare II, INOF y Sebine. La organización llamó a la ministra Celsa Batista a investigar “a fondo” a los directores y personal penitenciario.
El Observatorio Penitenciario Venezolano (OVP) condenó este miércoles 23 que presos políticos recluidos en el penal Yare II ubicado en el estado Miranda sean objeto de acoso, ensañamiento y extorsión por parte del director de ese penal.
A los presos políticos se les cobra una “razón” de entre 10 y 30 dólares y, tras algunas denuncias, se les amenaza con trasladarlos al Módulo 4, el preso general, donde se encuentran.
“Los presos políticos del Año II tienen demasiado miedo de mezclarse con los presos aliados de Prana, que incluso los extorsionan para que no los ataquen, pero nadie dice nada porque luego el director los regaña”, denunció un ex preso político del OVP.
Hace unos días, a este grupo de presos les confiscaron una cocina que habían montado y cobraban 10 dólares por llevar comida a sus familiares. “La única manera de que los presos venezolanos reciban una alimentación moderadamente equilibrada es con el apoyo de sus familiares”, recordó el Observatorio en un comunicado de prensa.
En el caso del penal Año II, según información obtenida por el OVP, a los reclusos se les alimenta con mortadela con grano, arroz o una arepa sin relleno para el almuerzo. Para cenar volvieron a tomar arepas con mortadela.
El Observatorio Penitenciario Venezolano también recordó que mujeres detenidas tanto por motivos políticos como generales se encuentran en condiciones similares en el Instituto Nacional de Orientación de la Mujer (INOF) en el estado Miranda, Los Tex.
La semana pasada estallaron disturbios en el INOF exigiendo la renuncia de la directora Annie Martínez y del subdirector. El Ministerio de Servicios Penitenciarios despidió únicamente a Martínez, mientras que el subdirector quedó a cargo del recinto.
El OVP condenó la situación de los presos políticos Juan Caguaripano y Juan Carlos Monasterios, recluidos en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) en El Helicoide de Caracas, quienes fueron separados de exigir sus derechos.
El organismo llamó a la ministra Celsa Bautista a “investigar a fondo las denuncias de acoso, intimidación y corrupción por parte de directivos y sus empleados”. Dijo que no sólo serán despedidos, sino que se les realizará una investigación penal “y, si son responsables, serán puestos a órdenes del Ministerio Público con prisión como consecuencia”.
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