Las autoridades en Eslovaquia detienen un automóvil después de que una cámara de seguridad captara a un perro alejándose a toda velocidad.
En el momento en que una cámara activó una alerta por exceso de velocidad, los uniformados no podían creer lo que estaban viendo. La foto muestra a un perro en el asiento del conductor del coche infractor sin nadie alrededor.
La propia policía subió la extraña imagen a su página de Facebook, en la que incluso el perro marrón parece estar sonriendo. Según informa el diario El País, el coche Skoda Kamik circulaba a 60 kilómetros por hora por una carretera con un límite máximo de 50.
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Más allá de lo curioso y divertido de la escena, los agentes pudieron trabajar para aclarar lo que estaba pasando. Al cabo de unos kilómetros lograron detener al culpable. Para su sorpresa, el coche lo conducía un hombre de 31 años.
¿Pero qué pasó? El sujeto explicó que mientras conducía el perro de repente saltó sobre su regazo y en ese momento la cámara de seguridad tomó la fotografía.
Todo claro, los agentes le pusieron una multa por conducir demasiado rápido.
De igual forma, consideran que cualquier animal suelto en un vehículo puede poner en riesgo la vida del conductor, ya sea de raza grande o pequeña. Por lo que pidieron el uso de medidas de seguridad para evitar accidentes.
