Caracas Al Dia

Una conocida librería del este caraqueño, con décadas de historia, cerró en abril pasado, luego de varios meses de liquidación y descuentos de hasta el 50%, una tienda que se suma a más de 60 que eventualmente se convirtieron en clave en la última década. % de descenso que quiere cerrar el sector del libro.
“Agradecidos por el apoyo todos estos años y por su incondicional compañía hasta el último día”, expresaron en su cuenta de Instagram los dueños de la librería, la estantería virtual donde ahora exhiben títulos a la venta e interactúan con los compradores.
Mientras tanto, la tienda está en proceso de demolición, con muebles, cajas llenas de libros y equipos como computadoras y televisores sentados en una esquina, según se puede ver desde el exterior.
Esta es la imagen de un sector que ha decrecido un 80% por la crisis desde 2013, que ha tenido que diversificarse y ha sentido poco la mejora económica que se produjo el año pasado, dijo a la organización Caracas Al Dia el presidente de la Cámara Venezolana del Libro. (Cavellibro), Julio Mazparot.
Esto, prosiguió, privó al país de “noticias mundiales, titulares nuevos que lamentablemente no llegan a Venezuela”, no a través de personas que tienen el poder de importarlos.
Una década dramática

Mazparrote ha explicado que la reducción de cerca del 80% del producto interior bruto (PIB) entre 2014 y 2021, según estimaciones independientes, “también se ha representado en el sector del libro”, que anteriormente había vivido un “período de bonanza”, durante el cual “un Se realizaron gran número de ferias y se mejoró el uso.
Pero, “desde 2013”, la falta de recursos para importar libros terminados y materias primas para la producción local de obra, el reducido poder adquisitivo, la piratería y la inmigración han afectado al sector, que ha caído en picada con la Covid en 2020. -19.
“Con el colapso de la economía, todos los distribuidores o importadores de libros cerraron gradualmente (…) las librerías también se vieron afectadas porque los consumidores dejaron de comprar libros a medida que disminuía la asequibilidad”, dijo.
En los últimos 10 años, Cavelibro ha perdido el 81,8% de sus afiliados, entre librerías, editoriales y distribuidoras, de 110 en 2013 a 20 en este momento.
La inmigración, además de significar la salida de “muchos consumidores”, deja en el país “gran cantidad de libros” de “bibliotecas privadas” que alimentan “un mercado secundario”, donde se venden “a precios muy bajos”.
Luego, cuando “el mercado estaba muy delicado, vino la epidemia”, que “hundió todo el sistema”, y la mayoría de las librerías restantes tuvieron que vender otros productos como útiles escolares y juguetes.
La imprenta, otro sector en retroceso

Mazparot, vicepresidente de la Cámara Venezolana de Editores, que agrupa a las editoriales privadas del 90 % de los libros de texto escolar, aseguró que las imprentas “han sido reducidas inicialmente al 20 % de su capacidad”, las cuales, de estar en pleno funcionamiento, sólo cubrir “todas las necesidades de Venezuela”, no sólo se puede exportar.
A fines de la década de 1990 y principios de la de 2000, Venezuela era el “exportador de libros” como país receptor, entre otros, Perú, Colombia, Ecuador, Puerto Rico y República Dominicana.
Un golpe a este sector fue un “principio” del régimen chavista que, explicó, no permite que las editoriales privadas utilicen libros en los centros educativos públicos, sino de la colección escolar bicentenario, que “ya hace más de cinco años que lo hace”. no imprimir”.
Para “renacer”, Mazparot considera fundamental que las empresas privadas puedan volver a ser proveedoras de escuelas públicas y bibliotecas estatales, lo que “permitirá fortalecer el sector”, no solo de empleo sino también de “cultura”.
Además, debe haber “señales claras” de una “economía sana y en crecimiento”, para que “las transnacionales puedan volver a casa”, así como reducir las “posibilidades de financiamiento” y la “volatilidad financiera”.
El presidente de Cavellibro también ve importante que se discuta en la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), de mayoría oficialista, una reforma a la ley del libro, que data de 1997, para incluir aspectos como la regulación digital. Énfasis en temas de propiedad intelectual.
incluyendo información de Caracas Al Dia