con una espátula
Al menos un miliciano proiraní murió hoy en feroces enfrentamientos con tropas estadounidenses cerca de una base militar en el oeste de Irak, en medio de un aumento de los ataques de estos grupos iraquíes contra objetivos entre los que se incluye la presencia estadounidense en el país árabe.
La milicia Al Dafirin, parte de la llamada Resistencia Islámica de Irak, afirmó hoy que el combatiente, identificado como Jafar al Sadiq Ahmed, “murió durante enfrentamientos con las fuerzas de infantería de ocupación estadounidenses en torno a la base de Ain al Asad” en el oeste de Irak.
La instalación, donde están estacionadas las tropas estadounidenses de la coalición internacional contrajihadista, fue escenario hoy de violentos enfrentamientos en los que militantes utilizaron lanzacohetes antitanque RPG-7 y otras armas.
Según el grupo proiraní, sus combatientes “se enfrentaron con la infantería enemiga y luego se retiraron”.
La base de Ain al-Assad ha sido blanco de ataques casi diarios por parte de las milicias desde el inicio de la guerra para albergar a las tropas estadounidenses en la Franja de Gaza, a las que los grupos han declarado la guerra por apoyar a Israel durante el conflicto.
Washington ya ha calificado de inaceptables los ataques, atribuidos a Irán, y el martes el Comando Central estadounidense (CENTCOM) afirmó que un avión militar AC-130 derribó un vehículo que transportaba a personas “responsables” del bombardeo. Misiles balísticos de corto alcance contra Ain al-Assad.
Fue la primera acción de represalia estadounidense contra las milicias en Irak, país con el que ha formado una alianza estratégica, mientras que las tropas estadounidenses ya han respondido al menos en tres ocasiones a ataques contra sus bases en la vecina Siria.
La acción estadounidense, que mató al menos a nueve personas, fue condenada por las autoridades iraquíes, que advirtieron que el ataque se llevó a cabo “sin ningún registro” por parte del gobierno de Bagdad.
Asimismo, el ejecutivo afirmó que la respuesta estadounidense “representa una escalada peligrosa” y representa “una violación inaceptable de la soberanía iraquí”.
Según el Pentágono, las fuerzas estadounidenses en Irak y Siria han sido atacadas un total de 66 veces desde el 17 de octubre por estos grupos proiraníes, que eran hostiles a las tropas estadounidenses en Medio Oriente antes de que comenzara la guerra en Gaza.
Los grupos han reactivado operaciones en Irak y Siria contra las fuerzas estadounidenses, luego de otro aumento de ataques en 2020 cuando exigían la retirada de Washington de la región.
Caracas Al Dia