con una espátula
La activista venezolana Rocío San Miguel, acusada de sus presuntos vínculos con un complot para asesinar a Nicolás Maduro, fue detenida durante cinco días este miércoles, según se confirmó el sábado, mientras ONG y grupos opositores condenaron su “desaparición forzada”, lo que ha sido ampliamente rechazado. dentro y fuera del país.
San Miguel -retenido en El Helicoide, sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia de Inteligencia (SEBIN) en Caracas- enfrenta un proceso judicial por “traición a la patria, conspiración, terrorismo y asociación”, según la denuncia del Ministerio Público, que negó la detención. en una “desaparición forzada”.
Además del activista que es beneficiario de medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) desde 2012, también fueron detenidos cinco de sus familiares y amigos, entre ellos una expareja, quien permanece detenida, mientras que los otros cuatro: dos hermanos, su hija y su padre. Al padre se le “prohibió salir del país” y se le eximió de “hablar con los medios de comunicación”.
A continuación se muestra un resumen de los tumultuosos cinco días del caso:
Sábado 10 de febrero: Denuncia
Los rumores que circularon a lo largo de la jornada del sábado sobre la supuesta detención fueron confirmados por agencias privadas a medianoche de ese día, cuando informaron que San Miguel ya había sido detenido el viernes en el aeropuerto internacional de Myketia, donde tenía previsto tomar un vuelo. Voló con su hija y desde entonces se desconoce su paradero.
Domingo 11 de febrero: Confirmación
Dos días después de su captura, el fiscal general, Tarek William Saab, confirmó la detención de San Miguel, quien -aseguró- estaba “presuntamente vinculado” con una “conspiración” que “pretendía atacar a la oposición” mediante la emisión de una orden de aprehensión. estaba hecho “la vida del Jefe de Estado” y de otros “altos funcionarios”, así como “ataques a varias unidades militares”.
Lunes 12 de febrero: comparecencia ante el tribunal
Además de la CIDH, un total de 204 organizaciones y 415 miembros de la sociedad civil venezolana condenaron la “desaparición forzada” de San Miguel, cuya defensa confirmó a Caracas Al Dia que también habían “desaparecido” cinco familiares y amigos, que luego fueron llevados ante un tribunal. tribunal de terrorismo.
Martes 13 de febrero: La solidaridad en cuestión
El gobierno de Maduro cuestionó la “solidaridad automática” con los “investigados por delitos contra el orden constitucional en Venezuela”, donde ese día se ordenó la privación de libertad contra el activista y su expareja Alejandro González, otros cuatro – Miranda Díaz San Miguel ( hija), Miguel Ángel y Alberto San Miguel (hermanos) y Víctor Díaz Paruta (padre de Miranda), fueron liberados.
Miércoles 14 de febrero: Presunta redada
Integrantes de una treintena de organizaciones en Venezuela han calificado de “ataques violentos” a espacios civiles y el caso de la defensora de derechos humanos Rocío San Miguel, cuya casa, unas horas después, según la defensa, fue allanada, que teme que “podrían “plantar pruebas”, hecho que fue rechazado también por ONG, activistas y políticos de la oposición.
Con información de Caracas Al Dia