La líder vente venezolana María Corina Machado reveló su plan secreto en una entrevista con Semana. A pesar de las amenazas y la persecución, Machado está convencido de que la sociedad venezolana está más cerca que nunca de lograr la independencia.
“El futuro de millones de venezolanos es el futuro de una sociedad”, afirmó.
Machado no negó que estuviera en riesgo, pero aseguró que eran necesarias medidas de seguridad para proteger a los cientos de dirigentes y ciudadanos que asistieron a la causa. La lucha es ahora más fuerte que nunca y no dejaremos solo a nuestro pueblo, aseveró. La oposición venezolana, según él, nunca ha estado en una posición de fuerza, mientras que el chavismo está en su punto más débil.
El proceso electoral del 28 de julio marcó un punto de inflexión en la historia reciente de Venezuela. Machado destacó la importancia de esta fecha, diciendo que el gobierno nunca imaginó el apoyo público que recibiría el candidato Edmundo González. “Pudimos recoger cada minuto, que es el documento original… y hoy están ahí”, aseguró, dando fe de la fuerza del movimiento opositor y de la autenticidad de los resultados.
Pero la persecución ha sido brutal. Machado describe la situación con crudeza: “Maduro habla de 2.500 personas que dicen haber detenido… Es algo brutal, masivo, sistemático”. Esta represión no ha disuadido a la oposición, que se mantiene firme en su búsqueda por restaurar la democracia en Venezuela. La dignidad y resistencia del pueblo venezolano, para Machado, es un testimonio del poder que impulsa este movimiento.
En este sentido, el reconocimiento internacional es crucial en esta lucha, y Machado enfatizó que “Estados Unidos, como otros países latinoamericanos, ha dicho que sabe que el pueblo venezolano ha ganado”. Para él, la única salida es que Maduro acepte los términos de una negociación que reconozca los resultados del 28 de julio. Tras rechazar la idea de nuevas elecciones, insistió, “hay que respetar la soberanía popular”.
A nivel personal, Machado se inspiró al hablar de sus hijos que viven fuera de Venezuela. “Todo lo que haces es por ellos”, admite, reconociendo el conflicto entre su lucha y el riesgo que supone para su familia. Sin embargo, la visión de una Venezuela libre y unida sigue siendo su principal motivación. “Queremos que nuestros hijos regresen… queremos trabajar”.