Caracas Al Dia
La política de “Paz Total” del presidente Gustavo Petro tuvo un año difícil en 2023 Además de desviarse del objetivo de persuadir a los grupos armados más importantes del país a deponer las armas, condujo a una reestructuración del panorama criminal de Colombia.
Por Insight Crime
La Política de Paz Total es la apuesta audaz del presidente Petro para negociar con los principales grupos armados de Colombia para poner fin a sus actividades criminales. En sus inicios, a finales de 2022, intentó albergar a más de una veintena de grupos armados y criminales, desde la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) hasta descendientes de paramilitares como las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC). ). ) y bandas criminales urbanas de diferentes ciudades del país.
Durante el año pasado, sólo cinco partidos pudieron entablar conversaciones activas con el gobierno. Los procesos de paz más avanzados hasta la fecha son con la ex mafia de las FARC, el ELN y el Estado Mayor Central (EMC), una confederación de ex grupos guerrilleros disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Las conversaciones lograron un cese al fuego con el Estado y la mesa de diálogo resultó en una reducción significativa de los enfrentamientos con la fuerza pública en todo el país.
Sin embargo, el resto de la situación de la negociación es incierta. Uno de los mayores desafíos es la falta de un marco legal para llevar a los grupos criminales ante la justicia, luego de que un proyecto de ley presentado por el gobierno con ese fin colapsara en el Congreso. Y el apoyo a Paz Total se ha derrumbado durante el año pasado. Aunque Petro ha perdido capital político y apoyo en el Congreso, los ciudadanos no están satisfechos con el avance de las negociaciones.
Para continuar leyendo, haga clic aquí.