Caracas Al Dia
Familiares y abogados venezolanos consideran la liberación de presos políticos a cambio de algunas concesiones, aún indefinidas, promoviendo la idea de un “intercambio humanitario” a favor del chavismo, una opción que reconocen como “desesperada”, no a años vista. Progresos en este campo.
La idea fue lanzada por la Coalición por los Derechos Humanos y la Democracia, apoyada por decenas de familiares de clientes a los que representan ante los tribunales y que forman parte del universo de 292 presos políticos tras las rejas en Venezuela, a la espera de juicios que no terminan, mientras reclaman su inocencia.
Por ello, abogados y familiares creen que dar una solución política a situaciones jurídicas como el encarcelamiento es una manera de “desbloquear” la crisis del país, o generar confianza para que florezcan los procesos de diálogo y negociación. Estas personas, a quienes la llamada Revolución Bolivariana tildó de conspiradores, terroristas o traidores a la patria.
Punto muerto

La directora de la alianza, Ana Leonor Acosta, explicó a Efe que la propuesta busca ayudar a personas que, según sus antecedentes, se encuentran detenidas por motivos políticos, entre ellas 174 militares y 13 sindicalistas.
“Hemos llegado a una situación, a un callejón sin salida, donde la justicia no avanza (…) Entonces estamos hablando de un intercambio humanitario, estamos hablando de la liberación de presos políticos y puede ser por razones humanitarias. Intercambio de otras liberaciones u otras circunstancias que el Gobierno pueda considerar.“, sostuvo.
El abogado comentó que quienes propongan el canje no serían quienes le digan al régimen de Nicolás Maduro qué pedir a cambio de la libertad de los “presos políticos”, sino que se trata de “reconocer las solicitudes” de los demás y asumirlas “que respeto”. “.
Sin embargo, ya hay ideas rondando, como el caso del empresario colombiano Alex Sabre, encarcelado en Estados Unidos por conspiración para lavar dinero, a quien el gobierno venezolano reivindica como diplomático y por el cual ha hecho todos los esfuerzos para lograr su liberación.
La coalición sabe que el chavismo quiere liberar a Saba y también busca apoyo para solicitar el levantamiento de las sanciones económicas, ideas que los impulsores del canje no niegan y, explicó Acosta, podrían implementarse mediante un acuerdo en la mesa de diálogo. entre los partidos gobernante y de oposición.
Y aunque los peticionarios no tienen el poder ni la autoridad para liberar a nadie encarcelado en otro país, ni para levantar sanciones, están dispuestos a apoyar la petición del régimen, algo que, en cualquier caso, no garantiza que Estados Unidos se lo conceda.
“Esta no es una decisión jurídica (…) estamos hablando de una situación más política, (…) una situación que es una discusión y un diálogo para la reconciliación de la sociedad”El insistió.
Los abogados esperan que otras organizaciones de derechos humanos se sumen a la propuesta, que planean promover ante organismos internacionales y ante actores involucrados en las discusiones políticas en Venezuela.
Medida desesperada

Yorbelis Oropeza, esposa del sindicalista Alcides Bracho, condenado este mes a 16 años de prisión por conspiración, apoya el canje porque cree que el asunto se puede resolver mediante una negociación, por lo que llamó a Nicolás Maduro a “sentarse con la familia”. y “escuchar a las víctimas” “al margen de cualquier cuestión política”.
“Esta es una medida desesperada. Quienes viven la situación de un preso político saben lo que es ser preso (…) Quienes enfrentamos esta situación queremos una solución inmediata porque el sufrimiento es interminable, somos familiares también presos, vivimos, trabajar, dormir, todo es trabajo de preso”, afirmó.
Oropeza, que ha denunciado que su marido sufrió un trato cruel e inhumano en prisión, entiende que el intercambio “puede resultar incómodo” para algunas personas, pero insiste en que es una “solución necesaria” para los familiares de los presos. Poner fin a la “pérdida emocional” que supone abordar estos casos.
Acosta confirmó que el intercambio de estos reclusos es necesario, sobre todo considerando que 20 “tienen graves condiciones de salud que no han sido atendidas”.
“Un día que un preso político pasa en la cárcel es un día menos para su salud y su vida. Quizás el tema de los presos políticos afecte a un grupo menor, pero no menos importante y esté relacionado con la justicia y el Estado de derecho en Venezuela”, concluyó.
incluyendo información de Caracas Al Dia