con una espátula
El ejército israelí admitió este viernes que tres rehenes secuestrados el 7 de octubre habían sido asesinados, después de que fueran identificados “erróneamente” como una “amenaza”.
“Durante la Guerra Shezaiya [en el norte], el ejército identificó erróneamente a tres rehenes israelíes como amenazas. Como resultado, los soldados abrieron fuego contra ellos y murieron.” Las fuerzas armadas dijeron en un comunicado “lamentar profundamente el incidente”.
Dos de los muertos fueron identificados como Yotam Haim y Samer Al Talalka. Ambos fueron secuestrados durante un sangriento ataque perpetrado por el movimiento islamista palestino Hamás en el sur de Israel el 7 de octubre, según el comunicado.
La familia del tercer rehén no quiso hacer pública su identidad.
Los cuerpos fueron devueltos a Israel.
El ejército insistió en que los tres murieron “en un campo de batalla activo” donde las tropas israelíes han estado librando “batallas continuas durante varios días” contra los combatientes de Hamás. AFP