Según el Servicio Geológico de Estados Unidos y la Agencia Meteorológica de Japón, los japoneses comenzaron el Año Nuevo 2024 con un potente terremoto de magnitud 7,6 en la prefectura de Ishikawa, que se encuentra en el centro de la isla principal del país, Honshu.
A causa de este potente terremoto, las autoridades del país emitieron un alerta de tsunami a la población, advirtiendo de olas de hasta cinco metros de altura a lo largo de prácticamente toda su costa occidental.
El primer ministro japonés, Fumio Kishida, instó a los ciudadanos japoneses a tomar las máximas precauciones ante la intensidad y a evacuar la zona afectada, donde se reportaron más de 20 réplicas.