Miley propuso dolarizar la economía y cerrar el banco central para evitar la emisión de pesos y la aceleración de la inflación. Está a favor de la libre portación de armas y de la venta de órganos y en contra del aborto. Ha confirmado que el cambio climático es mentira y es fanático de Jair Bolsonaro y Donald Trump, expresidentes de Brasil y Estados Unidos, respectivamente.
La victoria de Milla, único candidato del Espacio Avanza La Libertad con el 30,27% de los votos, puso a prueba el dominio de las dos principales coaliciones que han cambiado de poder en los últimos años y muestra la frustración de Argentina con la clase dominante por su incapacidad para revertir la inflación. que ha alcanzado el 115% anual-, la inseguridad y la corrupción.
El diputado economista nacional electo en 2021 afirmó que su partido es una “alternativa competitiva que acabará con el kirchnerismo y la casta política”, en referencia a la dirigencia tradicional que considera goza de innumerables privilegios.
En tanto, Bullrich se quedó con el 17,01% y Massa con el 21,32%. En total, Juntos por el Cambio alcanzó el 28,25% de los votos y el exministro de Seguridad y su opositor, el intendente bonaerense Horacio Rodríguez Larreta y el peronismo obtuvieron el 27,10% -teniendo en cuenta los votos de su otro candidato, Juan Grabois-.
Para Mariel Fornoni, Directora de Gestión y Consultoría Fit, “El resultado es muy contundente y habla del cansancio de la gente por el liderazgo político y de no encontrar respuestas en dos lugares en los que las campañas se preocuparon más por dentro (de su estructura) que por las necesidades de la gente. Milli es una de “La juventud más educada. Se convirtió en una ‘estrella de rock’ y luego se convirtió en una ‘estrella de rock’ para la clase baja”.
El analista señaló que el economista había comenzado a recuperar ventaja en los últimos días debido a la repentina devaluación del peso y la ola de crímenes violentos en Buenos Aires “que enojaron mucho a la gente”.
Franco Lacertessur, un estudiante de 19 años para convertirse en agente de aduanas que estuvo al mando de la campaña de Miley, dijo sentirse muy feliz porque su victoria significó un cambio en el sistema político argentino. “Estamos cansados de vivir así. ¿Por qué a mis 19 años estoy pensando en vivir en un país distinto al mío?
El joven insinuó que algunas de las opiniones de Miley pueden estar equivocadas, pero salvó la propuesta de revertir la inflación mediante la dolarización.
Bullrich, de 67 años, se inició en la política del peronismo de izquierda en los años 1970 y luego transitó por diversos cargos hasta integrarse al ala derecha de Juntos por el Cambio. Su referente político es el expresidente conservador Mauricio Macri (2015-2019), aunque ha aclarado que no será su títere.
El candidato señaló que está dispuesto a colaborar con el alcalde de la capital en el período previo a las elecciones presidenciales. “Los argentinos vivimos con dolor, con miedo, sin poder soñar ni proyectar ni vivir una vida normal. Pero hoy tenemos motivos para trabajar juntos. Impulsar y liderar un cambio profundo en Argentina. Un cambio que deje atrás la corrupción para siempre, que allane el camino a la austeridad”.
Mientras tanto, Massa, de 51 años y moderado dentro del peronismo, tiene vínculos bien establecidos con líderes estadounidenses y la comunidad empresarial de Argentina y es acogido por los mercados financieros.
“Las elecciones empiezan hoy, como el fútbol, al final del primer tiempo esta noche. Nos queda la segunda mitad, prórrogas y multas”, dijo el ministro, al final de la intervención de los candidatos tras los sorprendentes resultados. “Vamos a luchar hasta el último momento porque estamos convencidos de que los valores de venir a la Argentina, trabajar, producir, defender nuestros derechos y la educación pública deben permanecer intactos y no van a cambiar”.
Massa dijo que, ante el avance de la derecha, el peronismo debe sumarse a otras fuerzas políticas para que “el próximo gobierno no sea de unidad de coalición, sino de unidad nacional”.
Más de 35 millones de personas fueron convocadas a participar en las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), que sirven como una especie de prueba electoral para determinar la fuerza política y el potencial de sus candidatos para las elecciones presidenciales del 22 de octubre.
Las primarias definen a los interesados en ocupar 24 bancas en el Senado y 130 en la Cámara de Diputados del Congreso Nacional, así como candidatos a intendente de la Ciudad de Buenos Aires y al gobierno de la provincia del mismo nombre, así como a otras posiciones. El voto es obligatorio.
Varios precandidatos instaron a la ciudadanía a participar, temiendo que la abstención fuera mayor que en otras primarias celebradas en el pasado, debido a la frustración con la clase política.