La Fiscalía italiana ha confirmado con recientes revelaciones lo que muchos ya sospechaban: las grandes casas de la industria de la moda apoyan en base a sus ingresos redes ilegales de proveedores que explotan a los trabajadores y obtienen beneficios brutos, cobrando hasta 2.000 euros por prendas que cuestan 90 euros.
Según la investigación de la fiscalía, estos movimientos de empresas como Dior o Armani reflejan un margen de beneficio del 620% sobre los costes pagados por estas empresas a sus proveedores autorizados.
La operación Giorgio Armani, el brazo industrial del gigante italiano de la moda, está bajo administración judicial bajo sospecha de “gangmastering”, nombre dado a una práctica mafiosa que explota a trabajadores migrantes o vulnerables a través de sistemas de trabajo que violan sus derechos humanos y laborales.
Fiscalía italiana descubre una red ilegal de proveedores que llega a grandes casas de lujo como Dior o Armani
Según la investigación, los productores chinos, sospechosos de explotación laboral, pudieron producir bolsas por 90 euros, unos … pic.twitter.com/T2CJhWYacE
—DW Español (@dw_espanol) 12 de julio de 2024
La policía italiana ha revelado los costes reales de producción de los artículos de lujo de Armani como parte de una investigación sobre explotación laboral en su red de proveedores. Esta investigación señala una falta de control sobre la supervisión de las condiciones laborales en las empresas subcontratadas y responsabilidad por negligencia.
Entre estas empresas, las autoridades italianas señalaron las fábricas Lombarde y Minronzoni, que a su vez empleaban empresas que explotaban a trabajadores de origen chino y que no tenían estatus legal en territorio italiano.
Los trabajadores chinos y paquistaníes fueron explotados por estas empresas con sede en Italia y les pagaron entre 2 y 3 euros la hora, trabajando hasta 14 horas al día. Trabajaban los 7 días de la semana y en condiciones insalubres.
La investigación sugiere algo que ya es de dominio público, y es que este sistema de explotación se ha institucionalizado en la industria de la moda italiana.