La comunidad colonial cusqueña de La Guerra dejó de recibir agua desde la primera semana de enero hasta mediados de febrero. La empresa hidrológica dio servicio 72 horas por suspensión por más de un mes, denunciaron vecinos de la zona
Pobladores del casco colonial del municipio de Vargas de la Guaira pasan hasta un mes sin agua corriente en sus viviendas.
Según el testimonio de María Contreras, habitante del sector, el suministro de agua es irregular y obliga a la compra permanente de camiones cisterna o agua mineral, “lo que ha llevado a la quiebra a los vecinos de la zona”, comentó.
Contreras indicó que la comunidad dejó de recibir agua desde la primera semana de enero hasta mediados de febrero, cuando HydroCapital prestó el servicio durante 72 horas consecutivas, para luego suspenderlo nuevamente por más de un mes.
También señaló que, si bien el agua llega a la mayoría de las parroquias, las zonas altas no llegan a abastecerse. Explicó que la situación es “más complicada” porque ninguna autoridad oficial les ofrece soluciones.
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“El problema del suministro de agua es grave. Hay gente que tiene medios para conseguir líquidos en otros sectores, pero otros que carecen de medios para abastecerse y recurren a comprar agua mineral o camiones cisterna, lo que compensa el desequilibrio de los bajos ingresos de las familias”, destacó Contreras, quien recordó que el agua es un derecho humano y el Estado venezolano debe garantizarlo.
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